Sindicatos y derecha conservadora, contra la rebaja de pensiones

La confederación de CC OO y el Partido Demócrata Popular anunciaron ayer medidas contra el proyecto de bajar las futuras pensiones de cerca del 90% a casi el 65% del salario que tienen sus destinatarios en activo. La Administración considera que sólo así se puede asegurar a los ya jubilados su poder adquisitivo, como prometio el PSOE. El cumplimiento que dice haber dado el Gobierno a este compromiso para 1984 acaba de ser negado por UGT.Dias después de declarar que la revalorización de 1984 no mantiene el poder adquisitivo, CC OO se ha mostrado en contra del proyecto de "modificación radic...

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La confederación de CC OO y el Partido Demócrata Popular anunciaron ayer medidas contra el proyecto de bajar las futuras pensiones de cerca del 90% a casi el 65% del salario que tienen sus destinatarios en activo. La Administración considera que sólo así se puede asegurar a los ya jubilados su poder adquisitivo, como prometio el PSOE. El cumplimiento que dice haber dado el Gobierno a este compromiso para 1984 acaba de ser negado por UGT.Dias después de declarar que la revalorización de 1984 no mantiene el poder adquisitivo, CC OO se ha mostrado en contra del proyecto de "modificación radical" del sistema de pensiones que trascendió el pasado jueves, y ha decidido proponer a UGT un acuerdo de actuación conjunta. Aunque espera que el Gobierno recapacite ante lo que sería "la más grave agresión contra los derechos de los trabajadores de los últimos años", ha acordado realizar una campaña explicativa, así como posteriores movilizaciones.

Según CC OO, las pensiones son un derecho adquirido y pagado durante largos años por los trabajadores, "un salario diferido de los pensionistas". A su juicio, los problemas reales de la Seguridad Social, lejos de los planteamientos procedentes ele la patronal, están en la existencia de un billón de deuda empresarial, la irracionalidad de las políticas farmacéutica y sanitaria, y un sistema de financiación muy deficiente e injusto.

De otro lado, el Partido Demócrata Popular ha anunciado que presentará una proposición no de ley. Sus argumentos son similares a los que esgrimió todo el Grupo Popular en el último debate presupuestario contra la congelación de pensiones a partir de 187.950 pesetas mensuales (hay menos de un millar) y las medidas de concurrencia: desprecio absoluto de los derechos adquiridos, expolio de la escasa renta de los pensionistas, e incapacidad de gestionar la Seguridad Social y racionalizar su gasto.

Un alto cargo del ministerio de Trabajo ha indicado que la reforma se concibe como mecanismo para garantizar el compromiso de mantener el poder adquisitivo de los cinco millones de pensiones, de las cuales más de dos tercios son mínimas (la media es de 26.160 pesetas al mes, el 72% del salario mínimo interprofesional). Incluso si no subiera ninguna, su coste anual aumentaría casi el 10%.

Pero UGT, que había pedido un 9% para la mayoría y 16% para las mínimas con cargas familiares, opina que la fórmula aplicada en 1984 tampoco lo mantiene, por destinar un punto del 9% a conceptos como el aumentar de 12 a 13 pagas las de los agricultores.

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