Especialistas en arte rupestre se reúnen esta semana España

El Gobierno alemán envió un analista a La Valltorta, Castellón, en 1942. Deseaba saber cuál era el material empleado para realizar una serie de pinturas rupestres que aparecen en cuevas y abrigos del valle. El hombre, provisto de martillo y escarpa, no encontró mejor modo de investigar que cortando un trozo de piedra y llevándosela a Alemania. "Un verdadero acto de barbarie", opina Eduardo Porta, responsable del Servicio de Museos de la Diputación de Barcelona, "hubiera bastado con consultar a cualquier técnico para que le dijera que se trataba de óxidos de hierro".La anécdota es indicativa de...

El Gobierno alemán envió un analista a La Valltorta, Castellón, en 1942. Deseaba saber cuál era el material empleado para realizar una serie de pinturas rupestres que aparecen en cuevas y abrigos del valle. El hombre, provisto de martillo y escarpa, no encontró mejor modo de investigar que cortando un trozo de piedra y llevándosela a Alemania. "Un verdadero acto de barbarie", opina Eduardo Porta, responsable del Servicio de Museos de la Diputación de Barcelona, "hubiera bastado con consultar a cualquier técnico para que le dijera que se trataba de óxidos de hierro".La anécdota es indicativa de la escasa protección que se ha venido dando a un patrimonio artístico de primera magnitud, como son las pinturas rupestres del Levante español y de otras zonas del mundo, ya que "pinturas rupestres hay en todo el planeta", afirma Porta. "Hoy tenemos localizadas pinturas rupestres en 85 países. El área más antigua es la mediterránea, pero también las hemos encontrados en zonas tan insospechadas como Tanzania y Canadá. En estos países la antigüedad no es la misma, pero, a cambio, tienen el interés de su actualidad. Se trata, en no pocas ocasiones, de pinturas repintadas ritualmente y utilizadas aún por los indígenas para sus cultos".

Para poder estudiar, primer paso para su conservación y defensa, el arte rupestre en todo el mundo, se han creado dos centros de procesamiento de datos, uno en Italia y otro en España, desde el que se suministrará información a cuantos especialistas lo deseen. En Italia se recogerán los datos de los países situados al este de su frontera, y en España, los situados a su oeste.

En esta línea de colaboración, especialistas de diferentes países se reúnen a partir de mañana, bajo el patrocinio del Consejo Internacional de Museos. La organización depende de la Diputación de Barcelona, en cuyo Servicio de Museos se halla el centro de datos español, la universidad de Zaragoza y el Ministerio de Cultura. La reunión durará cinco días. Se iniciará en el Museo Arqueológico de Barcelona, proseguirá en la universidad de Zaragoza y, posteriormente, los participantes visitarán diversas zonas de indudable importancia arqueológica: Albarracín, Albocácer y Peñíscola, donde se celebrará el acto de clausura.

El objetivo declarado es, fundamentalmente documental. Se trata de organizar la recogida de datos sobre distintos enclaves de arte rupestre y analizar sus posibilidades de conservación. Pero, lo principal es documentar los yacimientos, a fin de promover, de modo inmediato, su protección, para evitar su destrucción.

Los agentes destructores

"Estas pinturas", explica Porta, "han durado miles de años, en algunos casos, pero en los últimos decenios se ha acelarado el proceso de destrucción. El hecho de haber elegido la zona de Teruel-Castellón para la reunión se debe a que se trata de una zona especialmente castigada por los nuevas agentes destructores".Los agentes que provocan la destrucción de las pinturas son de tipo natural y, también, las actividades humanas. Entre los primeros: la luz del sol, cuando alcanza directamente a las pinturas; la lluvia; las bacterias; las sales solubles y los hongos litófagos. Entre los segundos, la agresión humana, incrementada en los últimos años por el factor turístico, que, a veces, iguala el gesto bárbaro del ingeniero alemán, dispuesto a llevarse un recuerdo de vacaciones.

"El turismo es un factor peligroso, porque la distribución de los abrigos en los que se hallan las pinturas coincide con los lugares por donde discurren las carreteras. Algunos de estos abrigos están a menos de 200 metros de las calzadas y su acceso es extraordinariamente fácil". Desde hace algún tiempo se protegen las cuevas con vallas, que resultan, sin embargo, muy frágiles para el desaprensivo decidido a vulnerar la roca. Hay un segundo tipo de agresión a las pinturas por parte del hombre, frente al que Porta no se muestra tan enconado. "El pastor que se refugia en las cuevas con su cabras para resguardarse de la lluvia o del frío lo que hace es proseguir una larguísima tradición no interrumpida. Posiblemente no podemos oponernos a ello ya que ese fue el origen de las pinturas. Se trata de una tradición ecológica".

Los especialistas coinciden en que el programa de defensa del patrimonio rupestre debe hacerse a nivel global, de ahí la importancia que otorgan a la reunión que se inicia mañana y que, tras la apertura oficial de las sesiones y la lectura del programa de trabajo, se haya designado, como primer punto en la orden del día los "objetivos políticos (nacionales, regionales, internacionales)". A continuación, se estudiará la situación actual de la documentación sobre el arte rupestre, los problemas terminológicos, con vistas a la operatividad de los archivos centralizados, "que en ningún momento quieren abolir los específicos de cada zona", y la automatización de los datos. La discusión de estos temas se prolongará durante los dos primeros días de la reunión.

El tercer día, miércoles, los participantes se trasladarán a Zaragoza donde analizarán la situación actual del arte rupestre en el mundo, con especial atención al área mediterránea, y los agentes que provocan su destrucción. El jueves y el viernes visitarán algunas de las cuevas donde se hallan las pinturas y proseguirán las discusiones sobre la conservación de las mismas elaborándose las conclusiones de la reunión.