EXTREMADURA

Ocultan durante tres años la muerte de un anciano para cobrar su pensión

Los familiares de un anciano fallecido hace tres años han mantenido en silencio su muerte presuntamente para seguir cobrando de la Administración el subsidio que recibía el pensionista. A consecuencia de un edema pulmonar agudo, el 15 de febrero de 1979, falleció Tomás Esteban Serrano, de 78 años. Fue enterrado dos días después en el cementerio municipal de Cáceres. Desde entonces sus familiares, de condición humilde, han seguido cobrando cada mes la pensión del anciano que ascendía a unas 18.000 pesetas.Parece ser que el asunto se descubrió cuando el director de una entidad bancaria de la loc...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Los familiares de un anciano fallecido hace tres años han mantenido en silencio su muerte presuntamente para seguir cobrando de la Administración el subsidio que recibía el pensionista. A consecuencia de un edema pulmonar agudo, el 15 de febrero de 1979, falleció Tomás Esteban Serrano, de 78 años. Fue enterrado dos días después en el cementerio municipal de Cáceres. Desde entonces sus familiares, de condición humilde, han seguido cobrando cada mes la pensión del anciano que ascendía a unas 18.000 pesetas.Parece ser que el asunto se descubrió cuando el director de una entidad bancaria de la localidad de Coria (Cáceres) se negó a entregar la pensión a un familiar que se había desplazado a cobrarla, exigiendo la presencia física del titular del subsidio.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En