Incidentes en Santander durante el concierto de la Orquesta de Cámara de Israel

Unas treinta personas que intentaban boicotear, en la noche del sábado pasado, la actuación en la Plaza Porticada de Santander de la Orquesta de Cámara de Israel fueron desalojadas violentamente por las fuerzas de seguridad, que practicaron siete detenciones y retuvo durante quince minutos al fotógrafo de EL PAIS Pablo Hojas.Todos los detenidos fueron puestos en libertad posteriormente. Las medidas de seguridad en torno a la orquesta israelí fueron incrementadas en previsión de nuevos incidentes.

Instantes después de que la Orquesta de Cámara de Israel iniciase su actuación en el Festiv...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Unas treinta personas que intentaban boicotear, en la noche del sábado pasado, la actuación en la Plaza Porticada de Santander de la Orquesta de Cámara de Israel fueron desalojadas violentamente por las fuerzas de seguridad, que practicaron siete detenciones y retuvo durante quince minutos al fotógrafo de EL PAIS Pablo Hojas.Todos los detenidos fueron puestos en libertad posteriormente. Las medidas de seguridad en torno a la orquesta israelí fueron incrementadas en previsión de nuevos incidentes.

Instantes después de que la Orquesta de Cámara de Israel iniciase su actuación en el Festival Internacional de Santander, a las once de la noche del pasado sábado, alrededor de treinta personas, situadas en las localidades altas de la Plaza Porticada, prorrumpieron en silbidos y gritos a favor del pueblo palestino y en contra de la agresión israelí a Líbano, desplegando una pancarta en la que se pedía el fin de la matanza de Beirut. Tras un momento de indecisión, las numerosas fuerzas de la Policía Nacional que se encontraban situadas estratégicamente en el interior del recinto, procedieron al desalojo violento del grupo, que en ningún momento, opuso resistencia.

A la salida del teatro, algunos manifestantes fueron golpeados por la Policía Nacional y conducidas a comisaría, así como el reportero gráfico de EL PAIS, al que la policía veló varios carretes fotográficos. Entre tanto, el escaso público presente en la Plaza Porticada continuó con la audición del concierto, que no fue interrumpido en ningún momento.

Los incidentes se produjeron a pesar de las importantes medidas de protección adoptadas por el Globierno Civil, que comprendía un amplio cerco policial alrededor de la Plaza Porticada, impidiendo la circulación en la zona de toda persona que no acreditase su asistencia al concierto. El boicoteo había sido organizado por el Movimiento Comunista y la Liga Comunista Revolucionaria, a los que se unió la Juventud Obrera Católica (JOC), organizaciones que han anunciado que proseguirán sus acciones en tanto que la orquesta israelí permanezca en Cantabria.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En