LA LIDIA

Todo vendido para las corridas de san Fermín

"Aquí, el Mundial no afecta para nada a la gran fiesta de los sanfermines y sus corridas de toros", nos dice Ignacio Cía, secretario general de la Casa de Misericordia de Pamplona, organizadora de la Feria del Toro, "y la prueba es que están todas las localidades vendi das, hasta el punto de que el mayor problema que tenemos ahora es satisfacer los numerosos compromisos de última hora, que se traducen en una enorme demanda de entradas para los festejos".Las corridas, con unos carteles sin relieves especiales, componen, no obstante, un buen abono, principalmente por las ganaderías anunciada...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

"Aquí, el Mundial no afecta para nada a la gran fiesta de los sanfermines y sus corridas de toros", nos dice Ignacio Cía, secretario general de la Casa de Misericordia de Pamplona, organizadora de la Feria del Toro, "y la prueba es que están todas las localidades vendi das, hasta el punto de que el mayor problema que tenemos ahora es satisfacer los numerosos compromisos de última hora, que se traducen en una enorme demanda de entradas para los festejos".Las corridas, con unos carteles sin relieves especiales, componen, no obstante, un buen abono, principalmente por las ganaderías anunciadas, todas ellas de prestigio que, en general, han dado buen juego en Pamplona. De cualquier forma la fiesta gira alrededor del toro y tiene alta categoría por sí misma. Empieza a las ocho de la mañana, con el chupinazo que anuncia la salida de la corrida de los corralillos del Gas. Allí comienza el encierro. Los pocos minutos que dura la carrera hasta la plaza son de enorme emoción. Un gentío precede a la manada, que debe galopar reunida.

Toreros como José Luis Palomar y Jorge Gutiérrez, recientes triunfadores en la feria de San Isidro, han sido incluídos en los carteles, pero no Luis Francisco Esplá, que debería de figurar en el abono pamplonés. Entre las figuras de siempre no faltan José Mari Manzanares y Niño de la Capea quienes, como siempre, torearán el ganado en teoría más cómodo de todo el ciclo. Sí falta, en cambio, Paquirri, el cual suele exigir unos honorarios muy altos que seguramente cercenarían el necesario nivel de beneficios de los festejos; y los organizadores no pueden permitirse estas alegrías, pues aquellos se destinan a los fines asistenciales de la Casa de Misericordia.

Esto explica también, en otro orden de cosas, por qué las reses de Victorino Martín no participan en la Feria del Toro. Sencillamente, lo que pide por una corrida rebasa, con mucho -según los organizadores- la parte del presupuesto prevista para la adquisición de ganado.

Artistas como Curro Romero y Rafael de Paula, insustituíbles en otras ferias, faltan un año más en la de San Fermín, y es razonable su ausencia, pues aquí las inhibiciones típicas en estos toreros ni se entienden, ni se toleran.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En