El mayor índice de fraude al seguro de paro se da en organismos de la Administración pública

La Administración pública, la Defensa Nacional, la propia Seguridad Social, y la Sanidad y servicios veterinarios, son entre otras, las actividades en las que mayor fraude se ha detectado al seguro de desempleo durante el pasado año, según el control efectuado por el Instituto Nacional de Empleo (INEM) en 1981.

De acuerdo con los datos aportados por el INEM correspondiente a la campaña contra el fraude, durante el pasado año se controlaron 4.095 centros de trabajo recogidos bajo el epígrafe de otros servicios y que incluye Administración pública, Defensa Nacional y Seguridad Social, ser...

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La Administración pública, la Defensa Nacional, la propia Seguridad Social, y la Sanidad y servicios veterinarios, son entre otras, las actividades en las que mayor fraude se ha detectado al seguro de desempleo durante el pasado año, según el control efectuado por el Instituto Nacional de Empleo (INEM) en 1981.

De acuerdo con los datos aportados por el INEM correspondiente a la campaña contra el fraude, durante el pasado año se controlaron 4.095 centros de trabajo recogidos bajo el epígrafe de otros servicios y que incluye Administración pública, Defensa Nacional y Seguridad Social, servicio de saneamiento de vías públicas, limpieza y similares; Sanidad y servicios veterinarios, Asistencia Social y otros servicios prestados; servicios recreativos y culturales; servicios personales; servicio doméstico; representaciones diplomáticas y organismos internacionales.De los cinco sectores de actividad económica más destacados en materia de fraude, es el anteriormente reseñado el que mayor índice de fraude alcanza. Sobre los 4.095 centros de trabajo controlados por funcionarios del INEM se han alzado 661 denuncias y el índice de fraude fue, de acuerdo con estos datos, del 16,1%. Tras el sector "otros servicios", se sitúa el de construcción con un índice del 14,8%; 28.983 centros de trabajo controlados y 4.300 denuncias.

Otras manufacturas (alimentación, textil, calzado, papel, caucho, etcétera), con 13.624 centros controlados y 1.818 denuncias tuvo un índice de fraude del 13,3%. Del sector de seguros y financieras se controlaron un total de 2.090 centros, de los que fueron denunciados 272. El índice de fraude fue del 13%. El ranking de sectores defraudadores lo cierra transportes y comunicaciones que, engloba a transportes por ferrocarril y carretera, marítimos y aéreos, actividades anexas al transporte y comunicaciones. Se controlaron 2.612 centros de trabajo, se elevaron 331 denuncias y el índice de fraude fue del 12,75%.

Los datos aportados por el INEM han servido de base para la campaña publicitaria contra el fraude que desde hace varias semanas viene repitiendo a través de vallas y de spots de televisión que el volumen del fraude supone al año 47.000 millones de pesetas. Las centrales CC OO y UGT han acusado a la Administración de utilizar datos sesgados, ya que las estimaciones se han realizado sobre un muestreo ue a juicio de estas centrales no es significativo.

El INEM, de acuerdo con afirmaciones de las centrales y tal como se recoge en la documentación aportado por el propio instituto, ha realizado un muestreo sobre sectores en los que presumiblemente se da mayor fraude. Los índices así obtenidos (el 13,3% por empresas y el 7,56% por los trabajadores) han sido extrapolados a nivel global. Los sindicatos defienden que las estimaciones efectuadas por la Administración en torno a los 47.000 millones de pesetas de fraude anual, están viciadas desde su origen y no responden a la realidad. El índice global resultaría más bajo si el muestreo se hubiera hecho sobre todos los sectores de actividad, incluidos aquellos en los que el fraude es más difícil que se produzca, y, además, sobre todas las provincias.

Basándose precisamente en lo incompleto del muestreo, en la última reunión de la comisión de seguimiento del Acuerdo Nacional sobre Empleo (ANE) CC OO y UGT expusieron ante el subsecretario de Empleo, Miguel Cuenca, sus dudas sobre la veracidad de las cifras de fraude manejadas en la campaña publicitaria. El representante de Trabajo señaló que la campaña se había basado en otros datos que no habían sido entregados aún a las centrales, prometiendo que en el próximo consejo general del INEM se aportaría copia de los mismos.

Los datos hasta ahora conocidos sobre el fraude se han obtenido mediante dos tipos de control, el directo y el indirecto. Por control directo se entiende el realizado mediante visitas de funcionarios a las empresas. El indirecto se ha realizado mediante citaciones a trabajadores que perciben el desempleo. En 1981 el número de trabajadores controlados directamente fue de 395.000. A 3.066 se les suspendió la precepción y 11.330 se les retiró definitivamente la misma como consecuencia de las irregularidades detectadas. Otros 223.683 parados fueron controlados indirectamente, citándoseles a charlas, cursillos, sellado de cartillas, etcétera. Como consecuencia de este control se produjeron 28.444 suspensiones y 3.995 extinciones.

Durante la campaña intensiva llevada a cabo hasta abril de 1982, el total de trabajadores controlados fue de 487.871, detectándose un total de 28.055 irregularidades. Se visitaron 34.185 empresas, levantándose 4.638 actas de liquidación a la Seguridad Social y 763 actas de obstrucción; es decir, empresas que se negaron a facilitar datos.

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