La Filmoteca Nacional proyecta esta semana 10 películas del director polaco Andrzej Wajda
La Filmoteca Nacional de España ofrece esta semana un ciclo de diez películas de Andrzej Wajda en la sala madrileña del Círculo de Bellas Artes. Wajda, uno de los más famosos cineastas polacos, estuvo arrestado tras el golpe de Estado del general JaruzeIski del pasado 13 de diciembre y ha sido puesto en libertad hace unos días. Wajda prepara actualmente en Cracovia un montaje teatral de Hamlet.
La reseña que programa la Filmoteca es suficientemente representativa de su filmografía -veintidós largometrajes desde que se graduó en 1954 en la escuela cinematográfica de Lodz- si bien no incl...
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La Filmoteca Nacional de España ofrece esta semana un ciclo de diez películas de Andrzej Wajda en la sala madrileña del Círculo de Bellas Artes. Wajda, uno de los más famosos cineastas polacos, estuvo arrestado tras el golpe de Estado del general JaruzeIski del pasado 13 de diciembre y ha sido puesto en libertad hace unos días. Wajda prepara actualmente en Cracovia un montaje teatral de Hamlet.
La reseña que programa la Filmoteca es suficientemente representativa de su filmografía -veintidós largometrajes desde que se graduó en 1954 en la escuela cinematográfica de Lodz- si bien no incluye El director de orquesta (1979) y El hombre de hierro (1981), debido a que todavía están en explotación en los circuitos comerciales de exhibición.Los productores de El hombre de hierro, Palma de Oro en el último Festival de Cannes, regalaron la semana pasada al Papa una copia original de la película cuyo argumento discurre en torno a los astilleros de Gdansk, desde las huelgas y matanzas de 1970 hasta la firma de los acuerdos en agosto de 1980, y en cuyo rodaje participó el líder de Solidaridad, Lech Walesa.
Se podrá ver en la Filmoteca (el próximo domingo a las seis de la tarde) El hombre de mármol (1976), precedente de El hombre de hierro, una profunda reflexión sobre los últimos años de Polonia en torno a la figura del "obrero ejemplar" y una dura crítica al modelo estalinista del trabajo.
El ciclo, que comenzó ayer con Canal (1957), incluye obras de todas las etapas de Wajda -las películas que tienen por tema la situación de la posguerra, la historia de Polonia y los problemas contemporáneos- y constituye, al margen del interés por una de las cinematografías más importantes del Este, una oportunidad de conocer la situación de Polonia a través de su cine.
Mañana se programa (en la sesión de la tarde) Cenizas y diamantes (1958) sobre el conflicto que enfrenta después de la guerra a dos tendencias opuestas: la del Partido Comunista y la del Ejército del Interior, dependiente del Gobierno polaco de Londres, movimiento de resistencia este último en el que había militado el propio Wajda.
El bosque de los abedules (1970) y Las señoritas de Wilko (1979) -que se proyectan jueves y viernes la primera, y sábado y domingo la segunda- plantean una reflexión sobre el tiempo y el enfrentamiento del hombre con su propia historia. Las dos son adaptaciones de relatos de Yaroslaw Ywaszkiewicz, fallecido en 1980 y considerado como la figura más destacada de la literatura polaca contemporánea. El bosque de los abedules -cuyo argumento tiene por protagonista a un hombre que se refugia antes de morir junto a su hermano guardabosques- es una de sus obras más difíciles y también una de sus mejores creaciones por el uso del color que evidencia su vocación y dominio de la pintura.
Wajda estudió también Bellas Artes en la Universidad de Cracovia. Las señoritas de Wilko propone, desde otra perspectiva, cuyo origen común también es la muerte, la imposibilidad para el protagonista de recuperar o revivir el pasado de su juventud.
La visión que Wajda tiene los problemas sociales de su país, en particular la confrontación entre la generación de los que hicieron la guerra y la generación que nace en la Polonia socialista, es el argumento implícito de Los brujos inocentes (1960) que se proyecta hoy a las diez de la noche. Una obra rodada al estilo documental y en la que algunos críticos ven un Wajda incapaz de comprender a la inmediata generación de la posguerra.
Caza de moscas (1968), que se exhibe el sábado a las cuatro de la tarde, es una de sus películas menos logradas: narra la historia de un hombre que abandona la familia y se va a la capital con el propósito de cambiar su vida. Sin anestesia (1978), que se proyecta el viernes y sábado, es, según palabras de Wajda, Ia historia de un hombre que es vaciado de su posición profesional el mismo día que le abandona su mujer". En Todo está a la venta (1968), programada para el jueves a las seis de la tarde, el director hace un homenaje a su amigo y actor preferido, Zbygniew Cybulski, fallecido a causa de un accidente. La película se convierte en una reflexión sobre el significado del cine.
La Filmoteca ofrece tres oportunidades, sábado y domingo, para ver La tierra de la gran promesa (1976), adaptación del relato del premio Nobel de Literatura, WIadyslaw Reymont (1867-1925), ambientado en la época de la industrialización textil de Lodz y que enfrenta al capitalismo con el naciente proletariado. Televisión Española ofrecerá esta película a partir del próximo lunes pero artificialmente troceada en cuatro episodios.