Barral presenta en Madrid su "resurrección" como editor

Como ave fénix de la edición española apareció ayer el catalán Carlos Barral en el ámbito madrileño en que eran habituales sus éxitos editoriales del pasado, cuando regia, sucesivamente, Seix Barral y Barral Editores. En los sótanos del hotel Suecia, en efecto, Barral presentó su nueva incursión en el mundo de la publicación de libros, que esta vez salta de la mano de la Editorial Argos Vergara, cuya colección Bibliotheca del Fénice dirige, y cuyos primeros libros son El otoño del exilio, de Manuel de Lope, y La exagerada vida de Martín Romaña, de Alfredo Bryce Eche...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Como ave fénix de la edición española apareció ayer el catalán Carlos Barral en el ámbito madrileño en que eran habituales sus éxitos editoriales del pasado, cuando regia, sucesivamente, Seix Barral y Barral Editores. En los sótanos del hotel Suecia, en efecto, Barral presentó su nueva incursión en el mundo de la publicación de libros, que esta vez salta de la mano de la Editorial Argos Vergara, cuya colección Bibliotheca del Fénice dirige, y cuyos primeros libros son El otoño del exilio, de Manuel de Lope, y La exagerada vida de Martín Romaña, de Alfredo Bryce Echenique.La colección fue presentada anteayer en Barcelona. Escritores de la época más pletórica de Barral y autores de la nueva hornada, además de un político, Antonio de Senillosa, asistieron a esta resurrección del editor.

En el acto de presentación de ayer, el editor y escritor explicó el nombre de la biblioteca novelística que dirige, y señaló que para designar a las aves que regresan de sus cenizas se usaba la palabra fénice en lo siglos XVI, XVII y XVIII. Juan Benet, que fue llamado por Barral para presentar una de las dos primeras novelas de esta colección, la de Manuel de Lope El otoño del siglo, dijo que este empeño de Barral «es de mucha altura», porque pretende ofrecer la edición de narradores de nuevo cuño.

Sobre la propia novela de De Lope, Benet recogió la indicación de Barral de que suponía un ejercicio de recuperación lingüística, y señaló que el escritor presenta una novela escrita en tono ocre, con un cierto aire fúnebre. El currículo que se presenta con el libro le parece más vivo a Benet, quien terminó su parlamento recomendándole a su presentado que escribiera «novelas como currícula». Manuel de Lope explicó, en respuesta Benet, que «cuando dos personas se pasean por el mismo jardín nunca ven el mismo jardín».

La novela de Bryce Echenique fue presentada por Juan Cruz, jefe de Cultura de EL PAÍS, quien dijo que estamos ante una obra de la ironía y ante «la resurrección nada exagerada de un importante editor español». Sobre La exagerada vida de Martín Romaña comentó que se trataba «de una novela sobre la dimensión humana de un expatriado», un libro que, a pesar de caminar por las veredas de la Europa cultural posterior a mayo de 1968, «no es ni culturalista, ni pedante, ni nostálgico». Bryce Echenique dijo, por su parte, que este libro «ha sido escrito para que me quieran más».

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En