Acuerdos de cooperación entre el PSOE y la Unión de Campesmos Leoneses

El PSOE de León y la Unión de Campesinos Leoneses (UCL), primer sindicato agrario de la provincia, con cerca de 4.000 afiliados, han llegado a una serie de acuerdos para coordinar sus actuaciones frente a la UCD local, que preside Martín Villa. Los acuerdos, según ambas partes, tienen su origen en la agresividad del partido del Gobierno, que en varias ocasiones ha intentado desmantelar a la Unión de Campesinos enfrentándola, aunque sin éxito, a sindicatos paraoficiales creados expresamente para controlar el voto agrario o mediante sanciones gubernativas dirigidas al desprestigio de la organiza...

El PSOE de León y la Unión de Campesinos Leoneses (UCL), primer sindicato agrario de la provincia, con cerca de 4.000 afiliados, han llegado a una serie de acuerdos para coordinar sus actuaciones frente a la UCD local, que preside Martín Villa. Los acuerdos, según ambas partes, tienen su origen en la agresividad del partido del Gobierno, que en varias ocasiones ha intentado desmantelar a la Unión de Campesinos enfrentándola, aunque sin éxito, a sindicatos paraoficiales creados expresamente para controlar el voto agrario o mediante sanciones gubernativas dirigidas al desprestigio de la organización.

Por lo que respecta al PSOE, su estrategia va encaminada a abrir una cuña en las zonas rurales, tradicionalmente conservadoras consideradas hasta ahora como coto privado de UCD, que, en función de la ley D'Hont, controla en solitario la Diputación y los dos tercios de la representación parlamentaria de la provincia.El pacto entre los socialistas y la Unión de Campesinos se refiere fundamentalmente a política municipal -los primeros controlan veinticuatro ayuntamientos, y los segundos veintiocho, con más de seiscientos concejales repartidos en 130 municipios- y al compromiso del PSOE de prestar asesoramientos técnicos al sindicato campesino y defender sus intereses en la Diputación, donde la UCL no está representada por decisión de la Junta Electoral, que asimiló sus candidaturas a las de los independientes como «agrupaciones de electores». Igualmente, los dos grupos se comprometen a coordinar sus respectivas políticas agrarias, partiendo, en principio, de un apoyo «sin condiciones» del PSOE al citado sindicato.

Sin embargo, ambas organizaciones han negado a EL PAIS que con estos pactos pretendan un trasvase masivo de afiliados hacia las filas socialistas, lo que comprometería la propia supervivencia de la UCL, por la desconfianza que la población campesina mantiene tradicionalmente hacia cualquier tipo de compromiso político. Se insiste en este sentido, en que las dos organizaciones mantendrán su autonomía y que la coordinación entre ambas es más una cuestión de autodefensa frente a UCD que un pacto político propiamente dicho.

No se descarta, sin embargo, que el PSOE y la UCL presenten candidaturas conjuntas en las próximas elecciones, cuestión en la que parece más interesada esta última. El tema no ha sido planteado todavía.