Los generales Bánzer y Natusch, expulsados de Bolivia por la Junta Militar
El ex presidente de Bolivia general retirado Hugo Bánzer y su colega militar Alberto Natusch, abandonaron ayer «voluntariamente» Bolivia, rumbo a Argentina, informó el jefe de la Junta de comandantes, general Luis García Meza.
Bánzer, que gobernó con mano dura entre 1971 y 1978, ayer se resistió en su domicilio de la ciudad de Santa Cruz, a novecientos kilómetros al este del país, a dejar Bolivia, después de recibir una «invitación» en ese sentido del jefe de los servicios de seguridad de ese distrito.
En cambio, Natusch, según las versiones periodísticas locales, fue apresad...
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El ex presidente de Bolivia general retirado Hugo Bánzer y su colega militar Alberto Natusch, abandonaron ayer «voluntariamente» Bolivia, rumbo a Argentina, informó el jefe de la Junta de comandantes, general Luis García Meza.
Bánzer, que gobernó con mano dura entre 1971 y 1978, ayer se resistió en su domicilio de la ciudad de Santa Cruz, a novecientos kilómetros al este del país, a dejar Bolivia, después de recibir una «invitación» en ese sentido del jefe de los servicios de seguridad de ese distrito.
En cambio, Natusch, según las versiones periodísticas locales, fue apresado el día anterior en La Paz.
El general Luis García Meza acusó a Bánzer y Natusch de ser «factores de perturbación política y desestabilización del proceso de reconstrucción nacional».
La Junta Militar que gobierna Bolivia ha anunciado el enjuiciamiento castrense del teniente coronel Emilio Lanza, jefe de una unidad de elite en la provincia de Cochabamba, que el lunes se rebeló contra el presidente García Meza y pidió su sustitución inmediata. El coronel Lanza acusó a García Meza de haber traicionado la confianza depositada en él por los militares, a raíz del golpe de Estado de julio pasado.
La confusión domina la situación del país andino. Las comunicaciones con Cochabamba y Santa Cruz están cortadas.
La Junta Militar hizo responsable ayer al «narcotráfico internacional» de buscar la desestabilización de Bolivia. Para el Gobierno de La Paz está en marcha «un plan conspirativo del extremismo que se opone a la institucionalización y la reconstrucción democrática que se han propuesto las FF AA».