Según el Gobierno boliviano, el Ejército intervino para evitar el acceso de los comunistas al poder
Según el Gobierno militar de García Meza, las fuerzas armadas tuvieron que intervenir el pasado día 17 de julio para evitar que los comunistas accedieran al poder por medio de la violencia. Mientras tanto, la Junta Militar ha instituido el servicio patriótico al Estado, que obliga a todos los ciudadanos a prestar sus servicios a la patria «en caso de ser requeridos».El ministro boliviano del Interior acusó el jueves al partido comunista, en un comunicado remitido a la Prensa, de haber pretendido servirse del electo presidente, Hernán Siles Zuazo, para acceder al poder por la fuerza.
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Según el Gobierno militar de García Meza, las fuerzas armadas tuvieron que intervenir el pasado día 17 de julio para evitar que los comunistas accedieran al poder por medio de la violencia. Mientras tanto, la Junta Militar ha instituido el servicio patriótico al Estado, que obliga a todos los ciudadanos a prestar sus servicios a la patria «en caso de ser requeridos».El ministro boliviano del Interior acusó el jueves al partido comunista, en un comunicado remitido a la Prensa, de haber pretendido servirse del electo presidente, Hernán Siles Zuazo, para acceder al poder por la fuerza.
Según el comunicado, Siles Zuazo tenía la intención de dar una cena de honor a representantes de las fuerzas armadas, «con el fin de mostrarles su respeto y su apoyo», pero, prosigue el comunicado, un grupo de extrema izquierda, provisto de metralletas, habría interrumpido la cena y causado una verdadera carnicería, que inmediatamente habrían atribuido a la derecha, para de este modo, acceder al poder.
En cuanto al servicio patriótico al Estado, el decreto ley que lo instituye señala que, dentro del objetivo de las fuerzas armadas de impulsar la «reconstrucción del país», el Gobierno «llama al esfuerzo compartido de todos y cada uno de los bolivianos» para que presten sus servicios cívica y patrióticamente al Estado.
El decreto hace hincapié en la decisión de impulsar el desarrollo de la nación, poniendo en marcha las fuerzas materiales e intelectuales que den como resultado una movilidad social al servicio de la nación. Ningún ciudadano cuyos servicios sean requeridos podrá excusar su concurso, bajo pena de sanción «por desacato».
El Gobierno de Hugo Bánzer instituyó un decreto similar de servicio militar obligatorio, pero referido sólo a los profesionales.