Impugnan a Senillosa

El viernes, día 16 de mayo, aparecia en el diario EL PAIS la noticia de la impugnación de la elección de Antonio Senillosa como presidente de la Comisión de Control Parlamentario Directo de Radiotelevisión Española, por parte de UCD y la Minoría Catalana. A quienes seguimos de cerca la mar cha de la política española, por llamarla de alguna manera y usando un término convencional, no nos coge de sorpresa esta impugnación viniendo de donde viene.Las cosas en este país marchan como marchan, precisamente porque aún no han comenzado a caminar. No existen unos intereses comunitarios nacionales, sin...

El viernes, día 16 de mayo, aparecia en el diario EL PAIS la noticia de la impugnación de la elección de Antonio Senillosa como presidente de la Comisión de Control Parlamentario Directo de Radiotelevisión Española, por parte de UCD y la Minoría Catalana. A quienes seguimos de cerca la mar cha de la política española, por llamarla de alguna manera y usando un término convencional, no nos coge de sorpresa esta impugnación viniendo de donde viene.Las cosas en este país marchan como marchan, precisamente porque aún no han comenzado a caminar. No existen unos intereses comunitarios nacionales, sino un afán, por parte de ciertos grupos que proclaman como causa última «su legalidad», de afianzamiento y liderazgo.

UCD, desde que el pueblo se cansó de promesas, no ha cesado de perder dividendos electorales. En los últimos meses estamos viendo como UCD se reduce a una potente máquina de la Administración central. Perdió en Andalucía, perdió en el País Vasco, perdió en Cataluña. Ahora ve cómo las cosas se le ponen menos «verde-naranja» en RTVE. Y, una vez más, no quieren tragar la urna electoral.

La Minoría Catalana presenta un problema para la impugnación de marcado carácter regional. Estos señores de la Minoría posiblemente hubieran aceptado, caso de ser alguien distinto de Antonio Senillosa. Para ellos, Senillosa representa un grupo más reducido en el País Catalán. Esto les humilla. Olvidan estos señores que la elección no ha sido a nivel de Cataluña, sino a nivel estatal, o de Administración central.

Quienes conocemos a Senillosa hemos celebrado su elección. La hemos celebrado porque es uno de los pocos hombres, fuera de la mentalidad de grupos o partidos políticos parlamentarios, que puede realizar una labor de saneamiento y democratización dentro de este organismo tan corrompido. Senillosa, y lo sabemos bien, pasa de cargos y representaciones. Es uno de los parlamentarios que, aun reconociendo su escasa representación parlamentaria, más tiempo dedica a las reuniones de comisiones. Es un hombre convencido de que para caminar, en este país, lo primero que hace falta es claridad y limpieza. En la comisión para la que ha sido nombrado presidente va a encontrar muchos problemas y dificultades. Señores de UCD y de la Minoría Catalana, evítenle, al menos, un problema: su obstinación en querer mantener el poder. Ya han demostrado la ineficacia e impotencia que les caracteriza; que dejen a otro, aunque les humille un poco o un mucho, que intente la tarea de purificación y limpieza./