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que cubrieron la reciente visita del presidente de Venezuela, Luis Herrera Campins, a Tenerife, y su posterior encuentro con el presidente Adolfo Suárez se vieron muy sorprendidos por los insólitos servicios de prensa puestos a su disposición por el gobernador civil de la provincia tinerfeña, Jesús Javier Rebollo. Ante la ausencia, que no fue explicada, de un representante de la Secretaria de Estado para la Información, el responsable de los servicios de acreditación tuvo la idea de situar en las solapas de tres funcionarios del Cuerpo General de Policía unos cartelitos que los identifi...

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que cubrieron la reciente visita del presidente de Venezuela, Luis Herrera Campins, a Tenerife, y su posterior encuentro con el presidente Adolfo Suárez se vieron muy sorprendidos por los insólitos servicios de prensa puestos a su disposición por el gobernador civil de la provincia tinerfeña, Jesús Javier Rebollo. Ante la ausencia, que no fue explicada, de un representante de la Secretaria de Estado para la Información, el responsable de los servicios de acreditación tuvo la idea de situar en las solapas de tres funcionarios del Cuerpo General de Policía unos cartelitos que los identificaban como jefes de prensa. Los periodistas no pudieron quejarse de las facilidades obtenidas de estos improvisados hombres de la información oficial, aunque no todos encontraron que el tratamiento recibido era lo correcto que debía. Uno de los jefes de prensa comentó, en una ocasión: «Está visto que servimos para todo, incluso para informar a estos periodistillas. »

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