Exposición en Valladolid sobre la tradición agrícola castellana
El pintor Domingo Criado, responsable también de la sección de humor, gráfico de El Norte de Castilla, ha presentado en la localidad vallisoletana de Simancas una carpeta en la que se recogen once dibujos suyos de aperos agrícolas tradicionales de Castilla-León. Domingo Criado comenzó a trabajar en el tema hace cinco años y ahora, por vez primera, ha sacado a la luz una selección de sus dibujos de unos utensilios de labor ya en desuso y que corren el riesgo de perderse definitivamente. «Sólo soy el copista de algo que han hecho los guarnicioneros de Castilla», ha señalado el pintor....
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
El pintor Domingo Criado, responsable también de la sección de humor, gráfico de El Norte de Castilla, ha presentado en la localidad vallisoletana de Simancas una carpeta en la que se recogen once dibujos suyos de aperos agrícolas tradicionales de Castilla-León. Domingo Criado comenzó a trabajar en el tema hace cinco años y ahora, por vez primera, ha sacado a la luz una selección de sus dibujos de unos utensilios de labor ya en desuso y que corren el riesgo de perderse definitivamente. «Sólo soy el copista de algo que han hecho los guarnicioneros de Castilla», ha señalado el pintor. «No es de mí, sino de ellos de quien hay que hablar y a quien hay que potenciar para que esa artesanía útil y valiosísima, reflejo de la civilización y el modo de vida del labrador castellano, no desaparezca para siempre.»
En la carpeta, de la que se lanzarán únicamente 135 ejemplares numerados y firmados por el autor, se incluyen collarones, albardones, costillares de collera, bridones, bridones de serreta, cabezadas y otros aperos, tanto de labor como de los que servían para engalanar a los animales en las jornadas festivas.
La carpeta de Domingo Criado, cuyo prólogo ha sido realizado por el escritor y periodista Miguel Angel Pastor, es el primer intento serio que se lleva a cabo para recoger, conservar y divulgar, aunque sea en pequeña escala, las formas y denominaciones de unos instrumentos de la vida del campo castellano-leonés, pero a los que la mecanización ha condenado al olvido, y, si no se evita antes, a la extinción.