Pekín afirma que el Polisario lucha por "una causa justa"

El «comité de notables» de la Organización para la Unidad Africana (OUA) sobre el Sahara Occidental se reunirá próximamente en Monrovia, con la participación del rey Hassan de Marruecos, anunció ayer William Tolbert, presidente de Liberia, quien también atribuyó una «importancia capital» a la propuesta del soberano marroquí de convocar una conferencia de los países ribereños del Sahara.

Los actos conmemorativos del 25º aniversario de la revolución argelina han brindado la oportunidad al régimen argelino de desarrollar una importante campaña diplomática en el sentido de precisar las ...

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El «comité de notables» de la Organización para la Unidad Africana (OUA) sobre el Sahara Occidental se reunirá próximamente en Monrovia, con la participación del rey Hassan de Marruecos, anunció ayer William Tolbert, presidente de Liberia, quien también atribuyó una «importancia capital» a la propuesta del soberano marroquí de convocar una conferencia de los países ribereños del Sahara.

Los actos conmemorativos del 25º aniversario de la revolución argelina han brindado la oportunidad al régimen argelino de desarrollar una importante campaña diplomática en el sentido de precisar las razones que mueven a este país a apoyar, sin ambages, el derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui y el apoyo político y militar al Frente Polisario. Según todo parece indicar, China Popular admite, como una «causa justa» la del movimiento independentista, y apoya la idea de una negociación entre sus dos principales encartados: Marruecos y el Frente Polisario.La conmemoración de un nuevo aniversario de la insurrección argelina no ha sido únicamente el pretexto para mostrar la potencia militar argelina y reafirmar los principios de la vida socialista, insertos en la «carta nacional». Paralelamente a ello se han llevado a cabo múltiples conciliábulos, en los que la diplomacia argelina ha podido precisar el sentido y la importancia del tema del Sahara Occidental.

Los actos del pasado 1 de noviembre no pueden reducirse a la «revelación» de la existencia, en la panoplia armada de Argelia, de los tanques T-72 o los aviones MIG-25. Junto a ello hay que hablar de la «clarificación» realizada con los representantes de las grandes potencia, que empiezan a interesarse en lo que ocurre más allá de Tinduf. Dos ejemplos significativos son las conversaciones mantenidas con las delegaciones norteamericana y china.

El consejero presidencial norteamericano para Asuntos de Seguridad Zbigniew Brzezinski, quedó «impresionado» por la importancia del desfile militar ofrecido por las fuerzas armadas argelinas. En su ámbito político, Brzezinski mostró un inusitado interés en las conversaciones informales mantenidas con Taleb Ibrahimi, miembro del buró político del FLN y ministro consejero de la presidencia, antes de reunirse con el titular de la diplomacia argelina, Mohamed Seddick Benyahia, y ser recibido en audiencia por el presidente Chadli.

Una «valoración consecuente» de las coordenadas políticas del conflicto del Sahara Occidental es el aspecto de mayor impacto que consagró las deliberaciones argelino-norteamericanas. Estas coinciden, por otra parte, con un coloquio celebrado en Hot Spring, en el estado de Virginia (EEUU), en el marco de la Décima Conferencia Anual Afro-americana.

En tal coloquio intervino el ministro de Asuntos Exteriores saharaui, Ibrahim Hakim el embajador marroquí en Liberia, Saadedine Taieb, y el senador norteamericano Stepeh Stephen Solarz, el cual reveló que la decisión del presidente Carter de vender armas a Rabat había sido tomada «bajo presión de Arabia Saudí, la cual correrá con todos los gastos».

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