Alarmantes datos en un estudio sobre la situación de la economía vizcaína

Un índice de paro superior al 15%, una tasa de inflación del 18% y una cantidad de horas de trabajo perdidas en la provincia superior a los dos millones son las notas más destacadas de la situación coyuntural de la economía vizcaína, que se analiza en profundidad en un amplio trabajo realizado por el departamento de estudios y estadística de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Bilbao.

En el capítulo referido al paro, el estudio sitúa la cifra. de parados en Vizcaya por encima de los 75.000, lo que supone una tasa del 15,82%. A esta conclusión llega la Cámara de Comercio de ...

Un índice de paro superior al 15%, una tasa de inflación del 18% y una cantidad de horas de trabajo perdidas en la provincia superior a los dos millones son las notas más destacadas de la situación coyuntural de la economía vizcaína, que se analiza en profundidad en un amplio trabajo realizado por el departamento de estudios y estadística de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Bilbao.

En el capítulo referido al paro, el estudio sitúa la cifra. de parados en Vizcaya por encima de los 75.000, lo que supone una tasa del 15,82%. A esta conclusión llega la Cámara de Comercio de Bilbao tras sumar la cifra de paro desanimado (trabajadores que persisten de buscar un nuevo empleo dada la dificultad de encontrarlo), que es en Vizcaya de 32.041. con el cálculo deparo estricto, que. posee el INE (41.900 trabajadores) y los activos marginales, que superan losl.300.El paro en Vizcaya, según el .mismo estudio, afecta fundamentalmente a la población más joven (el 55% de los parados tienen menos de veinticinco anos y casi un 30% no han obtenido aún su primer empleo) y a la población femenina (14,46% en el cuarto trimestre de 1978, frente al 7,62% de la población trabajadora masculina). Por sectores, la construcción es la que registra la mayor tasa de paro, seguida de cerca por la industria, y en mucha menor proporción, el sector de servicios.

El apartado de conflictividad laboral en Vizcaya arroja cifras de 171 conflictos laborales habidos entre los meses de enero y mayo de este año, con un total de 2.231.004 horas de trabajo perdidas: millón y medio en 51 conflictos laborales, cifra que, traducida en pérdidas, supone veintidos millones y medio de pesetas. En su trabajo, la Cámara de Comercio de Bilbao califica de preocupante el crecimiento del índice de los precios al consumo, que en los últimos meses roza en Vizcaya el 18%.

Analiza luego el estudio de coyuntura la grave situación por la que pasa el sector exportador vizcaíno, que a partir de comienzos de este año, a raíz de la revalorización de la peseta y los aumentos acumulados de los precios internos, ha sufrido una importante pérdida de competitividad, que puede situarse en una media del 30%, y en el caso del comercio con otros países, como Estados Unidos, se eleva casi al 40%. «Es necesario», dice el estudio, «arbitrar medidas urgentes de apoyo para las empresas exportadoras vizcaínas, ya que de otro modo se corre el riesgo de hacer peligrar la propia existencia de las mismas.»

Solamente la reactivación de la inversión privada puede paliar la crisis de la economía vizcaína. Este es el criterio de la Cámara de Comercio de Bilbao, que afirma que únicamente puede producirse esa reanimación si existe la posibilidad de acceder a fuentes financieras en unas condiciones aceptables y si existen expectativas empresariales positivas en cuanto al rendimiento de los proyectos de inversión.

Crédito escaso

Tras afirmar que es de todos conocida la política de restricciones crediticias que rige en los mercados financieros, señala que, con todo, la situación pudiera agravarse en este apartado con el preocupante descenso del ahorro privado. Mientras que en el período enero-mayo de 1978 los saldos de las cajas de ahorro vizcaínas crecieron a un ritmo del 1,03% mensual acumulativo, en el mismo período del presente año solamente lo hicieron en el 0,63%, e incluso en los últimos meses se registró una reducción en términos absolutos de dichos saldos.

«Este hecho», afirma el estudio, «limita las posibilidades financieras del sistema, lo cual es de vital importancia cuando la economía vizcaína se encuentra inmersa en una crisis como la actual, en la que coexisten tasas de inflación muy elevadas con niveles de paro alarmantes. »

La Cámara de Comercio utiliza luego datos de la revista Economía Industrial del Ministerio de Industria, referidos a las inversiones por provincias para revelar que en Vizcaya, para el conjunto de 1978, cada puesto de trabajo de origen industrial creado necesitó, por término medio, más de seis millones y medio de pesetas de inversión. «Ello quiere decir», afirma el estudio, «que si el paro en la industria fuera el 56,2 % del paro total estimado por nosotros, sería necesaria una inversión industrial de 280 millones de pesetas para ser reabsorbido.»

En la actualidad, el término medio de peticiones de trabajo en Vizcaya ronda la cifra de 6.600. «Si no se perdiera ningún puesto de trabajo de los existentes», señala la Cámara de Comercio de Bilbao, «para que el nivel de paro no aumentara, habría que invertir todos los años 44.200 millones de pesetas, que es casi el triple de la cifra de inversión calculada por la revista del Ministerio de Industria para todo el año 1978, en el supuesto de que dichos trabajadores tuvieran que ser contratados en su totalidad por el sector industrial. »

Mejoran los indicadores de producción en Navarra

La encuesta de coyuntura industrial en el segundo trimestre de este año hecha en Navarra por la Cámara de Comercio e Industria provincial apunta una sensible mejoría de los indicadores de producción. La infrautilización de la capacidad productiva pasó así del 29 %, en el primer trimestre, al 23 % en el segundo, pero las expectativas para el actual son pesimistas en su mayoría respecto a producción, ventas y pedidos nacionales, aunque muestran cierto equilibrio en inversión y situación del sector.

No obstante, la Cámara interpreta los resultados de la encuesta, más favorable para los indicadores de producción que para los de negocio, como una reacción estacional motivada por la necesidad de producir para compensar la inactividad que deriva del inminente período de vacaciones reglamentarias. Cabe advertir al respecto que los sectores de química y papel y artes gráficas han tendido a considerar normales sus pedidos y sus stocks, denotando que su mejoría se debe sólo a factores estacionales, mientras que en el sector de la madera ni siquiera estos factores han servido para superar la situación de atonía.