CCOO califica de engaño el proyecto de participación en la gestión de la Seguridad Social

«El proyecto que nos han presentado sobre participación de las centrales sindicales en la Seguridad Social es un auténtico engaño. Nosotros no estamos dispuestos a entrar en ese consejo para que todo siga igual y ser unos convidados de piedra», manifestó Nicolás Sartorius, miembro del secretariado confederal de CCOO, durante una rueda de prensa celebrada ayer en Sevilla. «Temo -añadió- que no quieren de verdad que entremos en ese mundo tenebroso y traten en realidad de ganar tiempo para arreglar las cuentas.»El señor Sartorius, que calificó al ministro de Sanidad de cuasi fascista, indi...

«El proyecto que nos han presentado sobre participación de las centrales sindicales en la Seguridad Social es un auténtico engaño. Nosotros no estamos dispuestos a entrar en ese consejo para que todo siga igual y ser unos convidados de piedra», manifestó Nicolás Sartorius, miembro del secretariado confederal de CCOO, durante una rueda de prensa celebrada ayer en Sevilla. «Temo -añadió- que no quieren de verdad que entremos en ese mundo tenebroso y traten en realidad de ganar tiempo para arreglar las cuentas.»El señor Sartorius, que calificó al ministro de Sanidad de cuasi fascista, indicó que el reglamento preparado por el Gobierno no da a los sindicatos participación ni control real; en cambio, concede todo el poder de decisión, en una instancia, al secretario de Estado para la Seguridad Social.

El líder sindical reiteró que la actitud de los trabajadores ya a depender del escoramiento a la derecha que UCD pueda experimentar. «No creo que las leyes vayan a depender exclusivamente del Parlamento, porque la democracia no consiste sólo en votar cada cuatro años, como algunos nos dicen ahora, sino también en ejercer derechos que están reconocidos en la Constitución, como el de huelga y el de manifestación», agregó.

Tras señalar que siempre se produce una separación entre el voto sindical y el voto político, Nicolás Sartorius declaró que ya las últimas elecciones habían producido un corrimiento en la dirección de identificar la actitud del trabajador como productor y su actitud como ciudadano, aunque «se trata de una tendencia aún débil, que sólo se verá potenciada en la medida en que el movimiento obrero logre entroncar con las fuerzas de la cultura para superar su propio techo electoral».

El dirigente comunista subrayó también que «hay una actitud más propicia a la unidad por parte de UGT después del 1 de marzo», anunciando que había ya algunos acuerdos de principio para realizar asambleas y manifestaciones unitarias el 1 de mayo.