Se admite a un curandero en un hospital de Italia

Por vez primera, por lo menos en Italia, en un hospital público se han abierto las puertas con todas las de la ley a un mago. Se trata del Hospital Regional de Benevento llamado Di Venere. Y el mago es el famoso curandero o pranoterapista (porque dicen que cura con el flujo de las manos) Nicola Cutolo, de 43 años, y padre de tres hijos.Lo que ha causado revuelo en Italia no es sólo el hecho de que un hospital regional haya permitido a un mago entrar oficialmente en su sancta sanctorum, casi cometiendo un sacrilegio en relación con la sagrada medicina oficial,...

Por vez primera, por lo menos en Italia, en un hospital público se han abierto las puertas con todas las de la ley a un mago. Se trata del Hospital Regional de Benevento llamado Di Venere. Y el mago es el famoso curandero o pranoterapista (porque dicen que cura con el flujo de las manos) Nicola Cutolo, de 43 años, y padre de tres hijos.Lo que ha causado revuelo en Italia no es sólo el hecho de que un hospital regional haya permitido a un mago entrar oficialmente en su sancta sanctorum, casi cometiendo un sacrilegio en relación con la sagrada medicina oficial, sino el hecho de que el jefe de cirugía general del hospital, el catedrático De Pergola, haya metido su firma para testimoniar que muchos de los enfermos a quienes el curandero Cutolo ha aplicado sus manos «han mejorado hasta en casos desesperados». Un botón de muestra es el enfermo Fabio de Strobel, enfermo de cáncer de riñón con metástasis en el torax y en el estómago. Después de ocho aplicaciones del nuevo médico el hospital ha certificado que han desaparecido todos los dolores atroces que tenla, todas las demás molestias, y que el examen radiológico ha demostrado un importante mejoramiento de las metástasis. Otro caso que ha llamado la atención es el de la enferma Caterina Coletta, con una grave artrosis cervical y ciática lumbar. Después de las aplicaciones de pranoterapia no sólo no tiene dolores, sino que le ha desaparecido la fiebre de 39 que ningún médico conseguía eliminar.

Cutolo ha declarado que está preparando una experiencia que demostraría que no es todo sugestión: «Estamos trabajando -ha dicho- con células enfermas conservadas en laboratorio. No hay tejidos nerviosos y, por tanto, no puede existir problema de sugestión.»

Con todos los enfermos la táctica del mago es la misma: imposición de las manos, concentración, ligeros tocamientos en las partes más enfermas.