Oposición española

La opinión pública española ha experimentado, en el curso de los dos últimos años, una progresiva sensibilización sobre el tema nuclear. Los comités antinucleares y las comisiones de afectados han surgido a lo largo de toda nuestra geografía. El 17 de abril del año pasado, el ministro de Industria aceptaba la necesidad de realizar un debate nuclear, pero declaraba que la alternativa a la opción nucleares el subdesarrollo. La opinión contraria la sustentan, fundamentalmente, los ecologistas.La comisión pro moratoria y plebiscito nuclear presentó al Congreso un escrito, firmado por varios parlam...

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La opinión pública española ha experimentado, en el curso de los dos últimos años, una progresiva sensibilización sobre el tema nuclear. Los comités antinucleares y las comisiones de afectados han surgido a lo largo de toda nuestra geografía. El 17 de abril del año pasado, el ministro de Industria aceptaba la necesidad de realizar un debate nuclear, pero declaraba que la alternativa a la opción nucleares el subdesarrollo. La opinión contraria la sustentan, fundamentalmente, los ecologistas.La comisión pro moratoria y plebiscito nuclear presentó al Congreso un escrito, firmado por varios parlamentarios, en solicitud de un referéndum sobre el tema.

La oposición nuclear es especialmente intensa en aquellos lugares en que está en funcionamiento o en construcción una central nuclear. En mayo de 1975 se realizó la primera manifestación antinuclear en nuestro país, en protesta por la central de Escatrón. Sin embargo, en ese mismo lugar, el 23 de febrero de 1977, un referéndum local proporcionó un sí masivo en favor de la central.

Las manifestaciones antinucleares se han extendido en los dos últimos años por todas las regiones españolas, en las que no han estado ausentes los incidentes con la fuerza pública ni las multas. La oposición más intensa se desarrolla, no obstante, en Cataluña y el País Vasco. En marzo del pasado año se produjeron tres incendios sucesivos en la central nuclear de Ascó, y varias veces los vecinos han boicoteado el suministro de materiales a la central.

Desde el invierno de 1975, las manifestaciones y campañas antinucleares se han sucedido en el País Vasco. El 24 de julio de 1977, 200.000 personas se manifestaron en contra de una costa vasca nuclear. Recientemente, el pasado 14 de enero un manifestante resultó gravemente herido como consecuencia de la actuación de la fuerza pública en la manifestación celebrada en San Sebastián. El atentado que ETA-militar llevó a cabo contra la central de Lemóniz, el 17 de marzo de 1978, produjo la muerte a dos obreros. Previamente, el 18 de diciembre de 1977, un militante de ETA resultó muerto cuando intentaba hacer estallar la central. El ex diputado vasco Letamendía defendió sin éxito en el Congreso una moción de paralización de las obras de Lemóniz y hace escasos días el Consejo General Vasco ha solicitado de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) un estudio sobre la citada central.

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