Cavero: "Me dio la noticia mi voz entrecortada y muy emocionado"

«Fue una conversación muy breve, seis o siete minutos, en la que me comunicó que los secuestradores le habían tratado correctamente y que se disponía a tomar el tren Puerta del Sol con destino a San Sebastián», manifestó a EL PAIS el ministro de Educación y Ciencia, Iñigo Cavero, una de las primeras personas a las que se dirigió, tras su liberación, José Javier Crespo.Iñigo Cavero, a quien a lo largo de toda la tarde se intentó localizar por este diario, en un intento de romper el hermetismo de las distintas fuentes oficiales sobre la liberación del señor Crespo, confirmó a este ...

«Fue una conversación muy breve, seis o siete minutos, en la que me comunicó que los secuestradores le habían tratado correctamente y que se disponía a tomar el tren Puerta del Sol con destino a San Sebastián», manifestó a EL PAIS el ministro de Educación y Ciencia, Iñigo Cavero, una de las primeras personas a las que se dirigió, tras su liberación, José Javier Crespo.Iñigo Cavero, a quien a lo largo de toda la tarde se intentó localizar por este diario, en un intento de romper el hermetismo de las distintas fuentes oficiales sobre la liberación del señor Crespo, confirmó a este diario la llamada telefónica desde la estación de ferrocarril de Chamartín, hacia las siete menos cuarto de la tarde, del delegado de su Ministerio en Guipúzcoa, secuestrado el pasado lunes por la organización ETA, rama político-militar. A través del teléfono del Ministerio, manifestó el señor Cavero, «me pasaron la llamada del delegado accidental en Guipúzcoa, que se mostró, con voz entrecortada, muy emocionado, y yo creo que en algunos momentos a punto de romper a llorar». Había leído los periódicos, a lo largo de su cautiverio únicamente le había sido permitido ver algunos espacios de televisión, y se había emocionado fuertemente por la noticia del asesinato de un conserje de un centro de formación profesional en Irún. «Aunque yo creo que ambas acciones de ETA no están relacionadas -comentó el ministro- (la de Irún puede estar más en función de la biografía de la víctima), el señor Crespo la comentó muy afectado.»

El delegado accidental de Guipúzcoa, según el señor Cavero, rechazó su ofrecimiento de trasladarse inmediatamente a la estación de Chamartín y proporcionarle un automóvil para que llegara a reunirse antes con su familia. «Yo creo que el principal deseo del señor Crespo en esos momentos era encontrarse entre gente, en el tren, y recobrar una cierta sensación de normalidad.»

Interrogado sobre las causas del secuestro, Iñigo Cavero, que había afirmado no haber preguntado al señor Crespo en la breve conversación sobre los detalles de su cautiverio (cuántos y cómo eran sus se cuestradores, lugar donde había sido retenido y detalles del trato que le habían dispensado durante su retención), dijo que él pensaba que respondía a una operación propagandística de Í ETA. Negó cualquier relación entre la puesta en libertad del delegado de Guipúzcoa y la concesión de 297 millones a la Consejería de Educación, del Consejo General Vasco para fomento del euskera. «Se trata de una pura coincidencia. La con cesión fue acordada en agosto y la orden de transferencia es anterior a la fecha del secuestro.»

El señor Crespo ha podido permanecer en Madrid durante su secuestro, según el ministro, y muy posiblemente haber sido liberado horas antes de que pusiera en conocimiento su liberación «por advertencias de ETA para que así lo hiciera».

El ministro de Educación y Ciencia, según manifestó, recibió una llamada del Ministerio del Interior, al que se disponían a telefonear tras la conversación con el señor Crespo, informándole que ya tenía noticia de la liberación a través del gobernador civil de Guipúzcoa.

Por otra parte, el señor Cavero, a través de un diputado del PNV, había instado un documento de condena del secuestro de las distintas ikastolas vascas que, según sus noticias, iba a ser firmado a mediodía de ayer.