Fuerzas políticas de Euskadi, interesadas en un pacto social vasco

«El imprescindible acuerdo entre empresarios y trabajadores de Euskadi debe enfocarse desde una óptica nacional. No podemos esperar que la conflictiva situación laboral que padecemos vaya a encontrar una solución en otros pactos de la Moncloa, como tampoco lo encontró en los primeros, que se realizaron en un ámbito que nos es ajeno y con perspectiva centralista.» Este párrafo pertenece a un escrito de la Consejería de Industria del Consejo General Vasco en el que se analizan las perspectivas de la industria vasca de cara a la negociación de un nuevo pacto social a escala estatal. Considera la ...

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«El imprescindible acuerdo entre empresarios y trabajadores de Euskadi debe enfocarse desde una óptica nacional. No podemos esperar que la conflictiva situación laboral que padecemos vaya a encontrar una solución en otros pactos de la Moncloa, como tampoco lo encontró en los primeros, que se realizaron en un ámbito que nos es ajeno y con perspectiva centralista.» Este párrafo pertenece a un escrito de la Consejería de Industria del Consejo General Vasco en el que se analizan las perspectivas de la industria vasca de cara a la negociación de un nuevo pacto social a escala estatal. Considera la Consejería que, dado el talante centralista desde el que se plantea aquél, «corta las esperanzas de solución a la conflictiva situación laboral de Euskadi».

«Si de verdad queremos que Euskadi tenga futuro -dice la nota-, si realmente queremos impedir que el país se nos caiga, empresarios y trabajadores vascos deben de negociar y deben ponerse de acuerdo. Pero deben negociar en Bilbao, San Sebastián, Vitoria o Pamplona.»Para la Consejería de Industria es fundamental en estos momentos de crisis que empresarios y trabajadores vascos clarifiquen sus posturas exteriorizando ante el pueblo vasco cuáles son sus intereses reales, cuáles sus aspiraciones y, de una forma clara, su actitud ante la delicada situación de la sociedad vasca. Para ello -señala el escrito- los amantes del país, las fuerzas democráticas y progresistas deben sentarse a la mesa de negociación y llegar con rapidez y de una forma global, a unos puntos mínimos de acuerdo.

«De ello depende la recuperación de la confianza necesaria para que reaparezca la inversión y consiguientemente disminuya el paro, se normalice nuestro contexto social y tengamos alguna perspectiva favorable a medio plazo.»

Insiste en sus escritos la Consejería de Industria en los aspectos negativos que puede tener para la enfermiza industria vizcaína el hecho de que el nuevo pacto social se circunscriba exclusivamente al marco negociador de Madrid. «Así sólo se conseguiría el deterioro de la situación vasca ante la imposibilidad de buscarle soluciones adecuadas desde el exterior, con repercusiones negativas de alcance imprevisto en todos los ámbitos del Estado.»

En su escrito, la Consejería de Industria concluye apoyando como necesidad imperiosa la negociación del acuerdo social vasco. «Tanto por tradición foral como por las diferencias objetivas de orden socioeconómico que presentan entre sí Alava, Vizcaya y Guipuzcoa es voluntad de esta Consejeria que las relaciones entre trabajadores y empresarios se planteen a nivel regional. »

A este respecto, la Consejería de Industria del CGV ha iniciado contactos con las asociaciones patronales y centrales sindicales vascas para instarles al «diálogo constructivo», de acuerdo con las líneas marcadas en su escrito, «en función única y exclusivamente del futuro del país y del bienestar de sus habitantes».

La primera de estas reuniones se celebró ayer en Bilbao. A ella asistieron el consejero de Industria, Mlkel Isasi, y el presidente de la Confederación General de Empresarios de Vizcaya, Luis Olarra.

Esta iniciativa de la Consejeria de Industria entronca de alguna forma con el proyecto de la Consejería de Trabajo del Consejo General Vasco de poner en marcha este otoño una comisión tripartita integrada por centrales sindicales, organizaciones empresariales y el Consejo General Vasco, que actuaría en funciones de arbitraje en los conflictos laborales que se planteen.

A tal efecto, y desde mayo, miembros de la Consejería de Trabajo se han entrevistado con la totalidad de las centrales sindicales vascas y en breve iniciarán una ronda de contactos con las organizaciones empresariales.

Juan Iglesias, consejero de Trabajo, se mostraba ayer escéptico con respecto a un pacto social vasco. «De momento no conozco su alcance y el sentido que se le quiere dar. Yo pienso que en Euskadi no se debe ir a pactos limitados sino a pactos amplios, a niveles de región o de todo el País Vasco. De cualquier forma me parece prematuro hablar hoy y ahora de pacto social vasco. Es preciso primero poner en marcha esa comisión tripartita y luego hablaremos. »

Más de un empresario y sindicalista vasco ha querido ver una posible integración de los dos planes de las consejerías de Industria y Trabajo de cara a lograr un pacto social vasco que a priori se considera saludable y deseable pero a la par poco menos que imposible de llevar a la práctica fuera de la influencia de Madrid.

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