La ONU condena el establecimiento de colonias israelíes en los territorios ocupados

La Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó ayer una resolución en la que se censura a Israel por el establecimiento de colonias de población en «Palestina y otros territorios árabes», ocupados desde la guera de 1967. La resolución afirma que tale acciones del Gobierno de Tel-Aviv «no tienen validez legal», y califica las mismas como «serios obstáculos a los esfuerzos encaminados a conseguir una paz justa y duradera en Orienté Próximo».

Después de una semana de debate, la resolución. que había sido presentada por Egipto, fue aprobada por 131 votos a favor, entre ellos los de Españ...

La Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó ayer una resolución en la que se censura a Israel por el establecimiento de colonias de población en «Palestina y otros territorios árabes», ocupados desde la guera de 1967. La resolución afirma que tale acciones del Gobierno de Tel-Aviv «no tienen validez legal», y califica las mismas como «serios obstáculos a los esfuerzos encaminados a conseguir una paz justa y duradera en Orienté Próximo».

Después de una semana de debate, la resolución. que había sido presentada por Egipto, fue aprobada por 131 votos a favor, entre ellos los de España y los países de Europa occidental. Estados Unidos y otras seis naciones se abstuvieron, y el único voto contrario a la resolución fue el del propio Israel.La Asamblea General de la ONU «deplora profundamente» el establecimiento de colonias de población judía en Cisijordanía y la franja de Gaza, y hace un llamarniento al Gobierno de Tel Aviv para que «desista de tomar cualquier tipo de acción que pueda cambiar el status legal, la naturaleza geográfica o la composición demográfica de los territorios ocupados desde 1967 incluido Jerusalén».

Además, la resolución pide a Israel que cumpla sus obligaciones internacionales, de acuerdo con las normas de la convención de Ginebra de 1949 para la pro tección de las poblaciones civiles en época de guerra, y solicita al secretario general de las Naciones Unidas que «mantenga urgentemente contactos con Israe destinados a asegurar la rápida implantación de esta resolución» y que informe de los mismos a la Asamblea General antes de que acabe el presente año.

El embajador norteamericano en la ONU, Andrew Young, manifestó ante la A samblea que la resolución coincidía plenamente con la postura oficial de su Gobierno, pero justificó su abstención alegando que Estados Unidos es el patrocinador de la Conferencia de Paz de Ginebra y que debía, por tanto, mantener una posición de estricta neutralidad. Los restantes países que se abstuvieron fueron Costa Rica, Fiji, Guatemala, Malawi, Nicaragua y Papúa-Nueva Guinea.

Pese a esta explicación de Young, pudo saberse que Norteamérica intentó hasta el último momento, sin éxito, que Egipto modificara su proyecto de resolución eliminando la referencia a Palestina. El incluir este término significaría, en opinión de altos funcionarios de Washington, el reconocimiento de un Estado palestino, con lo que se prejuzgaría así un tema que ocupará el centro de los debates cuando se reanuden las sesiones de la Conferencia de Paz de Ginebra. Simultáneamente, el secretario de Estado, Cyrus Vance, se reunía con líderes de comunidades judías norteamericanas y directores de periódicos judíos para asegurarles que Norteamérica no ha modificado su postura de apoyo a Israel.