San Juan de Luz

Gran despliege policial en la conmemoración del Gobierno vasco

Más de 1.000 agentes de las Compañías Republicanas de Seguridad (CRS) y de la Guardia Móvil -equivalente a los antidisturbios españoles- desplazó el ministro francés del Interior, señor Poniatowski, a la villa de San Juan de Luz para impedir que los nacionalistas vascos más moderados celebrasen el domingo un acto en memoria del XL aniversario del Gobierno de Euzkadi.

El despliegue policial pareció ciertamente exagerado para controlar a poco más de 2.000 viejos nacionalistas -muchos de ellos han cumplido ya los 60- que se limitaron a asistir a una misa y a colocar unos ramos de flore...

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Más de 1.000 agentes de las Compañías Republicanas de Seguridad (CRS) y de la Guardia Móvil -equivalente a los antidisturbios españoles- desplazó el ministro francés del Interior, señor Poniatowski, a la villa de San Juan de Luz para impedir que los nacionalistas vascos más moderados celebrasen el domingo un acto en memoria del XL aniversario del Gobierno de Euzkadi.

El despliegue policial pareció ciertamente exagerado para controlar a poco más de 2.000 viejos nacionalistas -muchos de ellos han cumplido ya los 60- que se limitaron a asistir a una misa y a colocar unos ramos de flores ante la tumba de José Antonio Aguirre, primer lendakari (presidente) del Gobierno autónomo vasco.

Las órdenes terminantes dadas por el Gobierno francés en el sentido de que no iban a consentir la celebración del homenaje popular disuadieron a muchos vascos de trasladarse a San Juan de Luz, pero, pese a todo, la caravana que se formó en la frontera llegó a rebasar el kilómetro a primera hora de la mañana.

Después de la misa y del homenaje en el cementerio ante la tumba de José Antonio Aguirre, donde Jesús María de Leizaola insistió en que ellos seguían fieles a la legitimidad nacida de las urnas de 1936, los asistentes trataron de manifestarse en la plaza de Luis XIV, donde fue desplegada durante cierto tiempo una enorme ikurriña que sería saludada con veneración, al tiempo que se entonaba el Eusko gudariak gera («Somos los soldados vascos»).

Fue en este momento cuando los CRS se dispusieron a intervenir después del despliegue tan espectacular que habían organizado durante toda la mañana. Los manifestantes se disolvieron rápidamente, aunque luego se produjeran algunos saltos en las calles próximas.

Ayer la policía francesa procedió a registros en domicilios de refugiados vascos españoles, algunos de los cuales fueron conducidos, según Efe, a la subprefectura, para proceder a su interrogatorio.

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