Anticonceptivo de un año de duración

Un anticonceptivo, que se implanta en la axila de la mujer, y que tiene un año de duración, es el último descubrimiento que acaba de anunciar un equipo investigador de la Universidad de Upsala, según informa la agencia Efe.Se trata de una cápsula de silicona, de unos tres centímetros de largo por dos y medio de diámetro, que se implanta quirúrgicamente y con anestesia local. La cápsula proporciona de forma continuada la dosis necesaria de estrógenos para suprimir la ovulación.

Según el equipo investigador del Hospital Universitario de Upsala, no parece que este sistema pueda reem...

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Un anticonceptivo, que se implanta en la axila de la mujer, y que tiene un año de duración, es el último descubrimiento que acaba de anunciar un equipo investigador de la Universidad de Upsala, según informa la agencia Efe.Se trata de una cápsula de silicona, de unos tres centímetros de largo por dos y medio de diámetro, que se implanta quirúrgicamente y con anestesia local. La cápsula proporciona de forma continuada la dosis necesaria de estrógenos para suprimir la ovulación.

Según el equipo investigador del Hospital Universitario de Upsala, no parece que este sistema pueda reemplazar a la píldora aunque sí ofrece una buena alternativa. Por otra parte, señalan que es factible conseguir una cápsula que prolongue sus efectos durante cuatro o cinco años.

Suecia está hoy a la cabeza de las investigaciones en este campo. La Organización Mundial de la Salud, por un lado, y potentes fundaciones norteamericanas -la Ford, por ejemplo- por otro, patrocinan en Estocolmo programas de estudio de anticonceptivos. Hace apenas unos meses, los suecos dieron a conocer otro descubrimiento que no fue muy difundido por las implicaciones morales que de él podrían deducirse. Se trata de un supositorio vaginal que la mujer se pone una vez al mes. Sus componentes producen una serie de reacciones y provocan, a las veinticuatro horas, una menstruación. Parece ser que el supositorio contiene de forma casi exclusiva las prostaglandinas estimuladoras del músculo liso. Las implicaciones morales se derivan de que la menstruación se produce tanto si la mujer está embarazada, como si no. Y en el primer caso, se trataría de un aborto.

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