GENTE

Gabriel Peña Aranda

Recién nombrado gobernador de Santander, se ha encontrado con un grave problema: la muerte a tiros por la Policía Armada de un perturbado mental, Ciriaco Lenza, que en pleno ataque de demencia, había previamente degollado de una cuchillada a uno de los loqueros que intentaron reducirle. La fuerza pública lo tuvo sitiado durante cerca de seis horas, utilizando mangueras, gases lacrimógenos y, por último, las armas de fuego. Algunos vecinos pedían a voces que lo mataran. «No creemos que los medios empleados para resolver este caso, con un ostensible alarde de fuerzas, no hubieran podido evitar l...

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Recién nombrado gobernador de Santander, se ha encontrado con un grave problema: la muerte a tiros por la Policía Armada de un perturbado mental, Ciriaco Lenza, que en pleno ataque de demencia, había previamente degollado de una cuchillada a uno de los loqueros que intentaron reducirle. La fuerza pública lo tuvo sitiado durante cerca de seis horas, utilizando mangueras, gases lacrimógenos y, por último, las armas de fuego. Algunos vecinos pedían a voces que lo mataran. «No creemos que los medios empleados para resolver este caso, con un ostensible alarde de fuerzas, no hubieran podido evitar la muerte de un solo horribre acosado... No se emplean otros medios para cazar a uña fiera escapada de una reserva», marfifiesta un grupo de médicos del Hospital Valdecilla, en un duro comunicado. «Una sociedad que es capaz de vibrar ante la muerte inútil de un hombre e incluso se alegra de la muerte de un hombre enfermo es una sociedad vengativa, y represiva», concluyen.

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