Todos los rehenes regresaron sanos y salvos a Amsterdam

Los 78 pasajeros y los cinco miembros de la tripulación del avión «DC-9» de la compañía holandesa KLM, secuestrado el domingo poco después de abandonar Niza, llegaron ayer por la tarde a Amsterdam, procedentes de Chipre. Entre los pasajeros figuran cuatro niños y 13 españoles.Se mantiene un riguroso secreto, por el momento, acerca del paradero de los tres secuestradores palestinos, a los que las autoridades chipriotas prometieron libertad para dirigirse al país que desearan. Se les vio por última vez al abandonar el aeropuerto de Larnaca en un automóvil con matrícula diplomática libia.

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Los 78 pasajeros y los cinco miembros de la tripulación del avión «DC-9» de la compañía holandesa KLM, secuestrado el domingo poco después de abandonar Niza, llegaron ayer por la tarde a Amsterdam, procedentes de Chipre. Entre los pasajeros figuran cuatro niños y 13 españoles.Se mantiene un riguroso secreto, por el momento, acerca del paradero de los tres secuestradores palestinos, a los que las autoridades chipriotas prometieron libertad para dirigirse al país que desearan. Se les vio por última vez al abandonar el aeropuerto de Larnaca en un automóvil con matrícula diplomática libia.

Portavoces palestinos han asegurado que ni la Organización de Liberación de Palestina, ni el Frente Popular de Liberación son responsables del secuestro, que han condenado, enérgicamente y que atribuyen a facciones terroristas de palestinos disidentes.

Niza-Túnez-Chipre

El «DC-9», que hacía el trayecto Málaga-Amsterdam, vía Niza, fue secuestrado al despegar de la ciudad francesa y obligado a dirigirse a Túnez, donde repostó carburante. Presumiblemente los secuestradores abordaron el avión en Málaga. De madrugada despegó de Túnez hacia Chipre, donde en principio se le negó el aterrizaje por las autoridades griegas, que volvieron sobre su decisión al ser informadas de que el aparato apenas disponía de carburante. En Larnaca, donde los secuestradores dieron permiso para que fuesen facilitados alimentos y bebidas a los pasajeros, fue repostada la aeronave, que a primera hora de la mañana del domingo reanudaba el vuelo, ahora con destino a Damasco.

Israel no cede

En ruta hacia Damasco los tres secuestradores dieron órdenes al piloto para que volara a Tel Aviv, donde inmediatamente fue cerrado al tráfico el aeropuerto Ben Gurión y sus pistas ocupadas militarmente. Dos cazas judíos despegaron para interceptar al «DC-9» y obligarle a abandonar el espacio aéreo israelí. Los secuestradores amenazaron con volar el avión si no se atendía su petición de que fueran liberados siete prisioneros en poder de Israel, para lo cual establecieron una hora límite que fue rebasada.

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Desenlace en Chipre

El «DC-9» voló de nuevo a Chipre; en el aeropuerto de Larnaca, tras prolongadas negociaciones con las autoridades chipriotas, accedieron a poner en libertad a sus 83 rehenes, a cambio de que se les permitiera abandonar la isla, presumiblemente rumbo a Libia.El ministro israelí de Defensa, Peres, atribuye el fracaso del secuestro a la negativa de Tel Aviv a transigir con las peticiones de los secuestradores, El Gobierno holandés, por su parte, ha agradecido su gestión a las autoridades chipriotas y deplorado que los secuestradores estén en libertad. La Haya tiene, la intención de insistir en apoyo, de una legislación antiterrorista internacional, al igual que Bonn, cuyo Gobierno ha reiterado la necesidad de una convención destinada a poner fin a los secuestros aéreos.

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