Los británicos comen menos y beben más

Los británicos comen cada día peor y beben un poco más, según se deduce de un informe publicado ayer por el Ministerio de Agricultura.Este informe, que recoge datos sobre cuestiones alimenticias obtenidos desde 1972 a 1975, indica que en la dieta de los británicos hay cada vez menos carne, huevos, grasas, azúcar, fruta y vegetales. Por el contrario, la presencia de patatas y cereales es muy abundante.

Mientras decrece la calidad de la comida, sube el consumo de alcohol. Cada británico bebe, según tales estadísticas, unas 206 pintas de cerveza al año, lo por 100 más de lo que solí...

Los británicos comen cada día peor y beben un poco más, según se deduce de un informe publicado ayer por el Ministerio de Agricultura.Este informe, que recoge datos sobre cuestiones alimenticias obtenidos desde 1972 a 1975, indica que en la dieta de los británicos hay cada vez menos carne, huevos, grasas, azúcar, fruta y vegetales. Por el contrario, la presencia de patatas y cereales es muy abundante.

Mientras decrece la calidad de la comida, sube el consumo de alcohol. Cada británico bebe, según tales estadísticas, unas 206 pintas de cerveza al año, lo por 100 más de lo que solía beber antes de que se recogieran estos últimos datos. El consumo de licores, por otra parte, también ha aumentado en un tercio con respecto al que existía en 1972.

Lo que comen los británicos es una preocupación gubernamental, que ve a este país en peligro de ser habitado por gordos. Para contrarrestar el efecto que los hidratos de carbono pueden hacer sobre el físico de los británicos, el Ministerio de Deportes ha lanzado una campaña que tiende a convencer a los ingleses de la necesidad de hacer ejercicio «para mantener en línea a Gran Bretaña».

Tenga o no éxito la campaña, lo cierto es que los ingleses seguirán comiendo patatas y cereales. Las comidas populares de este país están compuestas básicamente de esos alimentos. La parte fundamental del desayuno está interada por cereales y el plato popular, tan popular como la tortilla en España, es el formado por pescado y patatas, los inevitables fish and chips de los que está llena Gran Bretaña.