Colo Colo y el error que le costó la vida

Pocas veces el River de Gallardo se vio tan complicado como en los minutos finales del partido ante Colo Colo en el Monumental de Nuñez. Y es que si bien los millonarios clasificaron a semifinales en este segundo ciclo del entrenador, quedó la sensación de que el cuadro chileno fue superior en los dos pleitos de la llave.

Con el estadio convertido en un coliseo de 86 mil personas en contra de Arturo Vidal, el volante que provocó a los de la banda sangre hasta encolerizarlos, lo claro fue que el esquema de Jorge Almirón esta vez solo alcanzó para neutralizar al rival que para comprometerlo. Vidal recurrió al discurso de dejar la piel y la vida para motivar a sus compañeros y aseguró tener más títulos que cualquiera en el plantel rival, lo que avivó el debate periodístico previo. Vivió angustias finales el elenco local, pero no las suficientes para provocar el milagro que los hinchas chilenos anhelaban.

Para mayor desgracia, el gol que desnivela la clasificación es un cúmulo de errores. Una falta cobrada por Acuña que encuentra marcas flojas, a Vidal habilitando la línea, a Gil perdiendo la marca y un rechazo de Amor demasiado corto. Los regalos los aprovechó Colidio, un delantero de 24 años formado en Boca, vendido al Inter de Milán a los 17 y que deambuló antes de anclar en River donde se ganó la titularidad tras el laborioso triunfo en el Superclásico.

Héroe porque en la victoria sobresalieron más los defensores y volantes, que le dieron más pragmatismo a un equipo acostumbrado a los bollos y que aspira a jugar la final en casa, como el único cuadro argentino sobreviviente en una Copa que hace rato tiene sabor brasileño.

Colo Colo deberá abocarse ahora a la competencia interna, donde quedó a diez puntos del líder Universidad de Chile, pero con tres partidos pendientes. Se va con la satisfacción de haber cumplido los objetivos planteados a comienzos de año, con una fuerte inversión para terminar con la negativa racha internacional. Valorizó jugadores y avaló el proceso de Almirón, que salió con la dignidad intacta de la cancha de River para comenzar a delinear la próxima temporada. Con más ilusión, ahora que, como él dice, demostraron ser competitivos.