La banda que estafaba a profesionales con lingotes de oro falsos adquiridos en Internet

Los tres miembros, de nacionalidad española y sin antecedentes, vendieron una veintena de ellos a un local de 'compro-oro' en Ciudad Lineal. El botín superaba los 20.000 euros

El lote de lingotes de oro falsos aprehendidos por los agentes en Ciudad Lineal (Madrid).P. NACIONAL

Un botín que superaba los 20.000 euros con la venta de 20 lingotes de oro falsos. Así es como tres integrantes de una misma banda, de nacionalidad española y sin antecedentes, lograron estafar en repetidas ocasiones a un establecimiento de "compro-oro" en el distrito de Ciudad Lineal, en Madrid. Pero el "gato por liebre" se esfumó más rápido de lo que pensaban cuando la Policía Nacional les detuvo el pasado de diciembre por un presunto delito de estafa al descubrir su ...

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Un botín que superaba los 20.000 euros con la venta de 20 lingotes de oro falsos. Así es como tres integrantes de una misma banda, de nacionalidad española y sin antecedentes, lograron estafar en repetidas ocasiones a un establecimiento de "compro-oro" en el distrito de Ciudad Lineal, en Madrid. Pero el "gato por liebre" se esfumó más rápido de lo que pensaban cuando la Policía Nacional les detuvo el pasado de diciembre por un presunto delito de estafa al descubrir su modus operandi.

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La banda conseguía la mayor parte de los supuestos lingotes a través de Internet, a través de la plataforma de comercio electrónico Ebay, para luego acudir al local y hacerlos pasar por auténticos. Un proceso bien engrasado y sin apenas fisuras —habían logrado pasar por caja sin mayores problemas— hasta que los empleados empezaron a sospechar de su conducta.

La voz de alarma saltó un día en el que dos de los estafadores, que ya habían aparecido por el local sin levantar sospechas, intentaron vender por segunda vez cuatro lingotes que ellos previamente habían conseguido colar como verdaderos. La artimaña habitual no les dio el resultado esperado, pese a que la apariencia exterior de los objetos "pareciese real".

Los trabajadores del negocio de compraventa, al dudar de la autenticidad de las piezas, decidieron ponerse en contacto con la Policía no si antes comprobar la falsedad de las transacciones. Descubrieron, además, que los productos no reunían las características propias de este metal, tanto en peso como en composición. Los certificados presentados por la banda de estafadores tampoco eran oficiales. En poco tiempo, los agentes de los Grupos de Atención al Ciudadano dieron con el plan urdido por los tres individuos, quienes fueron arrestados. El lote de lingotes falsificados fue enviado para su análisis y posterior verificación.

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