Los Mossos evitan que una niña de Mollerussa sufra una mutilación genital

Según el diario 'Segre', la família de la pequeña tenía la intención de viajar a Guinea, su país de origen

Dos agentes de los Mossos en Lleida, en 2015.JAVIER MARTÍN

Los Mossos d'Esquadra han conseguido evitar que una familia practique en su país de origen, la República de Guinea (Guinea-Conakri), la mutilación genital femenina a una niña de Mollerussa (Lleida). Según han informado los Mossos, al conocer el caso se activó el protocolo establecido desde el año 2002 y se dispusieron a hablar con la familia para informarles de que la ablación genital está prohibida en España.

Tal como ha avanzado el diario Segre, la niña tiene que pasar un control pediátrico para comprob...

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Los Mossos d'Esquadra han conseguido evitar que una familia practique en su país de origen, la República de Guinea (Guinea-Conakri), la mutilación genital femenina a una niña de Mollerussa (Lleida). Según han informado los Mossos, al conocer el caso se activó el protocolo establecido desde el año 2002 y se dispusieron a hablar con la familia para informarles de que la ablación genital está prohibida en España.

Tal como ha avanzado el diario Segre, la niña tiene que pasar un control pediátrico para comprobar que no se le ha sometido a esta práctica antes y después del viaje, que todavía no tenían programado aunque sí tenían la intención de realizar.

En 2017 en Cataluña se detectaron un total de 132 casos gracias al protocolo para detectar y evitar esta práctica, según datos de la Generalitat. Además, en la actualidad hay 73 mesas locales que funcionan como reuniones entre profesionales de los servicios públicos que están en contacto directo con la población que podría ser practicante de la ablación. El objetivo del protocolo es detectar situaciones de riesgo, concretar el seguimiento de los casos y establecer las medidas que se tienen que llevar a cabo desde la primera sospecha.

La ablación sexual es ilegal en España y consiste en la mutilación de parte de los genitales externos femeninos para evitar sentir placer sexual, con la finalidad de que pueda llegar virgen al matrimonio. El Código Penal castiga esta práctica con una pena de 6 a 12 años de prisión.

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