‘Vía Crucis’ en Bilbao contra los recortes y la mala atención en Lanbide

Medio centenar de personas pertenecientes a más de una decena de colectivos sociales de Bizkaia han realizado una manifestación en Bilbao simulando un Vía Crucis que ha finalizado ante Sabin Etxea, la sede central del PNV, para criticar el "maltrato y los recortes" que, a su juicio, están sufriendo ciudadanos a los que "sin justificación" se les están retirando prestaciones sociales.

La iniciativa surge con el ánimo de exigir a los nuevos responsables políticos de Lanbide que acaben con las "malas prácticas" del Servicio Vasco de Empleo y para que amplíen la protección social, siempre s...

Medio centenar de personas pertenecientes a más de una decena de colectivos sociales de Bizkaia han realizado una manifestación en Bilbao simulando un Vía Crucis que ha finalizado ante Sabin Etxea, la sede central del PNV, para criticar el "maltrato y los recortes" que, a su juicio, están sufriendo ciudadanos a los que "sin justificación" se les están retirando prestaciones sociales.

La iniciativa surge con el ánimo de exigir a los nuevos responsables políticos de Lanbide que acaben con las "malas prácticas" del Servicio Vasco de Empleo y para que amplíen la protección social, siempre sobre criterios de "justicia social". "Denunciamos la constante vulneración de derechos sociales que se producen a diario en las oficinas de Lanbide y que afectan de manera más directa a las familias que sufren en sus carnes las consecuencias de la actual situación de crisis económica", ha asegurado Victor Villares, educador social en un centro de día de la capital vizcaína, informa Europa Press.

Villares ha criticado que las personas que viven en la calle y tienen el padrón en albergues o centros residenciales para poder acceder a la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) o están en pisos de inserción o pisos de acogida de forma temporal "ya no podrán acceder" a la RGI, por lo que "no van a tener posibilidad ninguna de salir de la calle, la mendicidad, la exclusión social o desarrollar un proceso de inclusión social".

En esta misma línea, ha deplorado la "demora de dos meses" en la atención a las personas que necesitan las prestaciones para poder llegar a fin de mes, que achacan a "la falta de personal" para dar salida al aumento de las situaciones de desempleo, precariedad y pobreza. Igualmente ha criticado la "imposición" de un número máximo de personas que pueden ser atendidas por día, lo que supone "guardar cola durante toda la noche" a las puertas de muchas de las oficinas de Lanbide.