Los 12 discos de pop y rock que hay que escuchar hoy (abril 2023)

¿Quién es? Un multiinstrumentista estadounidense amante de música tan maravillosa como la de The Kinks, Buffalo Springfield o David Bowie.

¿Es tan bueno A Big Life? Gran guitarrista, pasional cantante y fantástico generador de melodías, Ryan compone para A Big Life un puñado de canciones que invocan al Ray Dav...

- Ed Ryan, ‘A Big Life’

¿Quién es? Un multiinstrumentista estadounidense amante de música tan maravillosa como la de The Kinks, Buffalo Springfield o David Bowie.

¿Es tan bueno A Big Life? Gran guitarrista, pasional cantante y fantástico generador de melodías, Ryan compone para A Big Life un puñado de canciones que invocan al Ray Davis de los sesenta y al Nick Lowe de los setenta. Unas veces con las guitarras echando chispas y otras inclinándose a la dulzura, y siempre con buenos resultados.

- Boygenius, ‘The Record’

¿Quiénes son? Un grupo formado por tres de las más talentosas mujeres del indie estadounidense actual: Julien Baker (27 años), Phoebe Bridgers (28) y Lucy Dacus (27).

¿Es tan bueno The Record? Después de un disco de seis temas en 2018 este es el primer largo (12 canciones, 42 minutos) de un trío que enamora a los medios indies: chicas jóvenes afilando las guitarras y contando lo mucho que sufren. En True Blue suenan tan melódicas que por momentos parecen The Crabberries, Cool About it se acerca candorosamente a Simon and Garfunkel y en Not Strong Enough tontean con las estructuras de The Cure, incluso sin disimularlo ya que en la letra dicen “singing Boys Don’t Cry”. Se alternan en las voces, se apoyan en los coros y completan un buen disco.

- Metallica, ‘72 Seasons’

¿Quiénes son? Ya no podemos hablar de trash-metal. Ni siquiera de heavy metal. Metallica son tan clásicos del rock como AC/DC. O casi.

¿Es tan bueno 72 Seasons? Vale, es un álbum largo (77 minutos) y Metallica alcanzaron su máximo nivel de creatividad en los ochenta, pero en 72 Seasons todavía suenan amenazantes y adrenalínicos. Con un plus: James Hetfield ha escrito las letras más sinceras de su carrera, asumiendo en ellas sus problemas con el alcohol y su dolor por un divorcio reciente. Luce también un Kirk Hammett, que descorcha unos solos menos largos pero más imaginativos. Un disco que desmonta la teoría de los que afirman que Metallica están acabados.

- Alberto & García, ‘La herida’

¿Quiénes son? A pesar de lo que insinúa su nombre, no es un dúo, sino una numerosa banda asturiana con una década de carrera, cada vez con un sonido más pulido y bifurcándose por diferentes estilos.

¿Es tan bueno La herida? Del pop a la música latina, de Víctor Coyote a Juan Perro y Jorge Drexler o Quique González. Alberto & García proponen pop latinizado, mestizo, y por eso remiten inevitablemente a los que lo han hecho antes. A veces se muestran como unos Los Rodríguez sin estimulantes, con letras sobre la pérdida y el apoyo entre los de la tribu. Suenan muchos instrumentos en sus canciones en lo que parece una orquesta dispuesta a prestar diversión a toda la tripulación.

- Eddie Chacon, ‘Sundown’

¿Quién es? Quizá algún lector se acuerde de Charles & Eddie, un dúo de soul blandito que se puede integrar dentro de la sección one hit wonder (artista de un solo éxito), gracias a Would I Lie To You? El que siempre posaba con una melenita relamida era (y es) Eddie Chacon.

¿Es tan bueno Sundown? Cuando reapareció en 2020 con el recomendable Pleasure, Joy and Happiness, Chacon, hoy 60 años, reconoció que su ausencia de una década se debía al tiempo que tuvo que transcurrir para superar eso de ser un one hit wonder: o sea, subir muy deprisa, y bajar a la misma velocidad. Dos años después de su retorno ofrece Sundown, maravilloso monumento de soul relajado. Su voz en falsete se desliza por una base musical sinuosa que puede ir de la disco music suave al soul de Marvin Gaye. No hay ninguna prisa: todos los instrumentos (congas, flautas, teclados…) tienen su espacio y su desarrollo. Reconfortante, sublime.

- Valeria Castro, ‘Con cariño y con cuidado’

¿Quién es? Una artista canaria de 23 años que debuta en disco largo con esta absoluta maravilla.

¿Es tan bueno Con cariño y con cuidado? No se puede empezar mejor un disco que con Dentro. Una voz que pellizca, una instrumentación austera y un mensaje que te posiciona para lo que viene: “Que lo que canto no tiene más que lo que llevo dentro, que es todo lo que siento”. Le queda mucha vida por recorrer a Valeria Castro, con etapas de alegría alternados con sinsabores, pero con la mayoría de edad recién cumplida es capaz de transmitir una verdad muy pura. Voz que se suma a los jóvenes de este país que están tratando las músicas tradicionales con herramientas actuales (como Rozalén, Guitarricadelafuente, María José Llergo, Rodrigo Cuevas…), Castro mira y mima su tierra (la canaria) con sensibilidad: “Cuidando la raíz”, canta. Perdón es un bolero de 2023 que se escucha con congoja. Costumbre muestra versos hermosos sobre este mundo que habitamos: “Quien no cuida la tierra y no está a su vera, no ve el dolor”. Todo hilado con una voz que sabe llegar a los sitios más recónditos del alma. Desde ya, uno de los discos del año.

- La Paloma, ‘Todavía no’

¿Quiénes son? Una banda madrileña de guitarras que después de un EP de cinco canciones publican su primer disco largo, Todavía no.

¿Es tan bueno Todavía no? De vuelta a mediados de los noventa, al Super 8 de Los Planetas. Este grupo del barrio de Tetuán suena a aquellos años en los que el indie-rock se comía el mundo. Las labores de vocalista se las reparten entre dos de ellos: se nota perfectamente porque pasan de sonar a Los Planetas a Pereza, que tan digna es una cosa como la otra. Influencias al margen, lo importante es que componen buenas canciones que apuntan a himnos festivaleros.

- La Plazuela, ‘Roneo Funk Club’

¿Quiénes son? Granada, inagotable tierra de talentos musicales. Estos dos chicos de 25 años son del Paseo de los Tristes y El Realejo. El Indio y El Nitro se hacen llamar.

¿Es tan bueno Roneo Funk Club? Esto es como una rave donde cabe electrónica, flamenco o música disco. Reivindican los barrios contra la apisonadora de la gentrificación y se nota que han escuchado a Manzanita, Los Chichos o Pata Negra. Pero también lo que se pone en los clubes a partir de las tres de la madrugada. Porque si existe un punto intermedio entre Morente y Anderson .Paak, ahí se coloca La Plazuela, a los que presagiamos larga vida en la música. Uno de los debuts del año.

- Varios artistas, ‘Stoned Cold Country’

¿Quiénes son? Un puñado de artistas del country comercial estadounidense, alguna leyenda de la Americana como Steve Earle o jóvenes valores del rock ceñudo como Marcus King realizando versiones de los Rolling Stones, como si se hubieran grabado pocas.

¿Es tan bueno Stone Cold Country? Solo un problema de concepto: aunque se presente como un “homenaje country a la música de los Rolling Stones”, se escucha poco country en el disco. Apenas un par de piezas que tengan que ver con la música que popularizo Hank Williams, como la buena revisión de Dead Flowers (a la que los Stones ya dieron un aire country) de Maren Morris. A pesar de no coincidir el objetivo con el resultado, el disco merece la pena. Hay piezas trilladas a las que se les dota de originalidad, como un Miss You (por Jimmie Allen) impulsado por una armónica, o un rockero Satisfaction (por Ashley McBryde). Por encima se eleva Angie, a la que Steve Earle proporciona un dramatismo que casi supera a la original, y la explosiva Can’t You Hear Me Knocking, de ese titán de la guitarra que es Marcus King.

- Chip Taylor, ‘The Cradle of All Living Things’

¿Quién es? Quizá no suene mucho el nombre de Chip Taylor. La mayor parte del tiempo estuvo en la sala de composición, escribiendo canciones que luego interpretaron Janis Joplin, Frank Sinatra o Willie Nelson. Uno de sus mayores éxitos es fijo en la escaleta de las emisoras de rock clásico, Wild Thing, que interpretaron los Troggs. Taylor grabó sus propios discos, enfocados sobre todo al country.

¿Es tan bueno The Cradle of All Living Things? Con 83 años y sometido a quimioterapia, Taylor ha sacado fuerzas para componer y cantar hasta 28 piezas, una hora y 26 minutos de música. Acompañado de piano la mayoría de las veces, con algunas guitarras acústicas y una suave batería, este trabajo puede recordar a los conmovedores últimos discos de Johnny Cash junto al productor Rick Rubin. La voz de Taylor es honda, a punto de resquebrajarse. Emociona escuchar algunos temas, como Do You Feel Ok, donde con apenas un hilo de voz, dice: “¿Sientes el dolor?, cuando llegue la mañana todo el dolor se habrá marchado”. Escalofríos.

- Daisy Jones and The Six, ‘Aurora’

¿Quiénes son? Primero fue una novela de Taylor Jenkins Reid, luego la serie Todos quieren a Daisy Jones y ahora el disco. Esto es lo que se llama fenómeno pop.

¿Es tan bueno Aurora? Todo tiene que ver con la agitada vida de Fleetwood Mac después de la salida Peter Green y con la incorporación de Stevie Nicks y Lindsey Buckingham, a mediados de los setenta. El contenido de este fenómeno está inspirado en esos Mac. La sorpresa es que los mismos actores de la serie, Sam Claflin y Riley Keough, son los que cantan aquí. Dirigiendo está el productor y compositor Blake Mills. El disco está bastante bien, algunas veces hasta brillante, con las voces de los dos actores conduciendo hacía los Jackson Browne, Joni Mitchell, los Eagles o, claro, Fleetwood Mac. Ojo, son canciones originales (no versiones) que respiran el aroma de mediados de los setenta en Laurel Canyon. Si se ha visto la serie se apreciarán aún más estas canciones.

- J. Teixi Band, ‘En el barrio’

¿Quién es? Un histórico del rock and roll español, Javier Teixidor, fundador de Mermelada, cuyo primer disco, el fundamental Coge el tren, data de 1979. Teixi ha seguido tocando en todos los garitos de España y editando discos fabulosos.

¿Es tan bueno En el barrio? Lo más parecido que tenemos por aquí a la E Street Band. Teixidor se rodea de una banda de sonido grasiento, con vientos, piano, órgano, armónica… Juntos, unas veces suenan a Nueva Orleans y otras a ardiente rhythm & blues. Temas propios y un puñado de versiones castellanizadas que obligan al baile. No te los pierdas en directo si pasan por tu ciudad.