Un fiscal pide indagar a Alberto Fernández por “golpes recurrentes” y “violencia psicológica” contra su expareja

El expresidente argentino Alberto Fernández ejerció “violencia física, psicológica y económica” contra la exprimera dama Fabiola Yáñez. Al menos eso asegura el fiscal Ramiro González, que este lunes pidió al juez su indagatoria tras la presentación del resultado de dos meses de investigación. En un escrito de 160 páginas que recoge el testimonio de testigos, fotos, conversaciones telefónicas y mensajes de whatsapp, el fiscal reconstruye lo que consideró un cuadro “de distintos tipo de violencia” de Fernánez contra Yáñez “prácticamente desde el inicio de su relación”. La violencia “luego se conviritó en habitual”, fundamentalmente “en la modalidad del golpe a mano abierta”, durante la convivencia de la pareja en la residencia presidencial de Olivos, entre 2019 y 2023. El juez a cargo, Julián Ercolini, deberá ahora decidir si la prueba recogida por el fiscal es suficiente para indagar a Fernández y avanzar hacia un procesamiento.

El fiscal imputó a Fernández dos lesiones agravadas, una lesión que produjo el debilitamiento permanente en la salud de la exprimera dama y coacciones para evitar que Yáñez lo denunciase. Si se lo encuentra culpable de todos los cargos, el expresidente podría ser condenado a hasta 18 años de prisión.

“Alberto Fernández golpeó a Fabiola Yáez en el rostro y le provocó una lesión en su ojo derecho que inició con dolor y enrojecimiento para, luego, ir cambiando su tonalidad hasta ponerse negro en los días posteriores”, escribió el fiscal González. En un segundo episodio, dice el fiscal, el expresidente provocó a su pareja un moretón en el brazo. Las fotos de ambas lesiones llegaron al juez por casualidad, cuando analizaba el contenido del teléfono de la secretaria del presidente, María Cantero, investigada en una causa por enriquecimiento ilícito en el manejo de comisiones de seguros otorgados al Estado. El mismo juez Ecolini citó para el 20 de noviembre a Fernández y a otras 38 personas, entra las que está el marido de Cantero, a declarar en esta causa.

Además de la violencia física, “Alberto Fernández ejerció de un modo sistemático violencia psicológica contra Fabiola Yáñez bajo las formas de acosos, hostigamientos, controles, indiferencia, insultos, culpabilización, destrato, retiro de la palabra, ninguneos y hostilidad”, escribió el fiscal. Una perito psiquiatra aportada por la querella estableció que la exprimera dama padecía “múltiples secuelas de daño psíquico reactivo a situaciones de violencia sistemática y crónica sufridas por Yañez desde hace ocho años en el marco de su relación de pareja”.

Hacia el final del mandato de Fernández, en diciembre de 2019, Yáñez se estableció en Madrid junto al hijo pequeño de ambos. En ese momento se inició, dijo el fiscal, un condicionamiento “económico” y pedidos expresos de ocultar las agresiones. Yáñez, estableció el fiscal, “fue coaccionada para que no denunciara el hecho frente al juez de la causa y, de ese modo, se afectó el trámite de un expediente federal producto de las amenazas del expresidente”.

Fernández ha negado desde el principio las acusaciones de su expareja. Su defensa cuestiona que Yáñez se negase a entregar su teléfono celular y aportó pruebas con capturas de pantalla.

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