A Petro ya no le sobrevive ningún ministro de su primer Gabinete
Iván Velásquez en Defensa, Susana Muhamad en Ambiente y Gloria Inés Ramírez en Trabajo dejan sus carteras con renuncias irrevocables que confirman la inestabilidad del equipo que rodea al presidente de Colombia
Nadie es inamovible para Gustavo Petro. El presidente de Colombia quiere resultados para la recta final de su Gobierno, que pavimenten la continuidad del progresismo en las elecciones del próximo año. Nunca ha dudado en prescindir de quien haga falta, y le precede la fama de cortar cabezas sin pensárselo dos veces desde que fue alcalde de Bogotá, entre 2012 y 2015. Su Gabinete ha sido inestable, pero la crisis actual muestra también otras señales. Con la salida definitiva de ...
Nadie es inamovible para Gustavo Petro. El presidente de Colombia quiere resultados para la recta final de su Gobierno, que pavimenten la continuidad del progresismo en las elecciones del próximo año. Nunca ha dudado en prescindir de quien haga falta, y le precede la fama de cortar cabezas sin pensárselo dos veces desde que fue alcalde de Bogotá, entre 2012 y 2015. Su Gabinete ha sido inestable, pero la crisis actual muestra también otras señales. Con la salida definitiva de Iván Velásquez de la cartera de Defensa pierde al último de los tres ministros que lo acompañaban desde el primer día. Susana Muhamad en Ambiente y Gloria Inés Ramírez en Trabajo son las otras dos. Todos presentaron su renuncia irrevocable el pasado domingo, sin que se conozcan todavía sus reemplazos. El presidente se queda solo.
La crisis de Gabinete, anticipada desde finales del año pasado, sigue en marcha, sin desenlace previsible. La profundizó el caótico Consejo de Ministros televisado de la semana pasada, lleno de reproches y acusaciones. Cinco jefes de cartera han dado el portazo definitivo desde entonces. El de Culturas, Juan David Correa, y el de Interior, Juan Fernando Cristo, hicieron parte de la desbandada junto con Muhamad, Ramírez y Velásquez. El presidente ha pedido la renuncia protocolaria a todos los demás, incluso a los recién nombrados. Ya en enero habían dimitido el canciller, Luis Gilberto Murillo –reemplazado por Laura Sarabia–; el ministro de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones o TIC, Mauricio Lizcano; y la de Transporte, María Constanza García.
El presidente confía en un círculo muy pequeño de colaboradores. Ha llevado al extremo la idea de que los ministros son fusibles. Con dos años y medio en el poder, luego de cuatro grandes remezones de Gabinete y numerosos relevos a cuentagotas, Petro ha nombrado más de cuarenta. Muhamad, Ramírez y Velásquez eran los últimos sobrevivientes de aquel primer equipo de Gobierno, y tenían en común que no habían chocado –al menos no públicamente– con un mandatario que suele premiar la lealtad.
Susana Muhamad (Bogotá, 47 años), que el año pasado presidió en Cali la enorme conferencia mundial de biodiversidad, la COP16, ha sido considerada una potencial heredera política. Bajo su batuta, el Ministerio de Ambiente elevó su perfil. También se plantó en aquel Consejo de Ministros de la discordia. “Presidente, como feminista y como mujer, yo no me puedo sentar en esta mesa de Gabinete, de nuestro proyecto progresista, con Armando Benedetti”, dijo ante las cámaras, en referencia al nuevo jefe de Despacho, un político camaleónico con varias investigaciones y señalamientos de violencia de género. Este lunes publicó su carta de renuncia, en la que recuerda que las negociaciones diplomáticas de la COP16 se retoman entre el 25 y el 28 de febrero en Roma, y le plantea al presidente que, para cerrar esa labor, su renuncia podría hacerse efectiva a partir del 3 de marzo. Petro todavía no se pronuncia al respecto.
Gloria Inés Ramírez (Filadelfia, Caldas, 68 años), la primera ministra comunista de Colombia, encarna la reforma pensional, quizás el mayor logro de un Gobierno que prometía profundas transformaciones sociales. También dejó encaminada la reforma laboral que sigue viva en el Congreso. Propios y extraños le reconocen un ánimo conciliador y dialogante que corresponde con su historia como líder sindical. “Hoy hago entrega de un Ministerio del Trabajo que ha transformado vidas, aportando una visión respetuosa de los derechos de las mujeres”, escribió en la renuncia irrevocable que presentó el domingo, salpicada de críticas nada veladas a la violencia machista. “Los tiempos actuales requieren la continuidad de las transformaciones que espera el pueblo en la ruta de la justicia social, ambiental, de género y sobre todo desde la lucha frontal contra la corrupción y la politiquería”, apuntilló.
Iván Velásquez (Medellín, 69 años) era el último de los ministros que le han durado años a Petro. Presentó su renuncia de forma sorpresiva este martes, de momento sin mayores detalles sobre sus motivaciones. Su salida, en medio del deterioro de la seguridad, coincide además con los ajustes en la cúpula de la Policía Nacional. El hasta ahora director, William René Salamanca, fue relevado la víspera por Carlos Fernando Triana. En un contraste con la longevidad de Velásquez, el antecesor de Petro, Iván Duque, tuvo tres ministros de Defensa a lo largo de su cuatrienio.
Petro considera a Velásquez un “hombre justo”, las palabras con las que lo defendió en enero de 2023, cuando la Fiscalía de Guatemala atacó al jurista por su reconocido papel al frente de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICG). Desde entonces, cerró filas en más de una ocasión para apoyarlo, a pesar de las muchas críticas por el avance de los grupos armados en Colombia. La oposición anunció en varias ocasiones sus intenciones de hacerle una moción de censura, la más reciente a raíz de la tragedia humanitaria en el Catatumbo. La arremetida de la guerrilla del ELN en esa región fronteriza con Venezuela ha dejado más de 54.000 desplazados y al menos 56 homicidios, de acuerdo con el más reciente reporte diario del propio Ministerio de Defensa. En medio de la crisis de las múltiples negociaciones de la paz total, el presidente ya había declarado una “ofensiva total” en el departamento del Cauca contra las disidencias de alias Iván Mordisco. Ambas regiones estarán, con toda probabilidad, entre las principales preocupaciones de quien lo releve.