Proteger y adaptarse, esos son los dos retos de las fundas de móviles y tabletas. Diferentes plásticos y materiales lo intentan con diferente acierto. La firma inglesa Tech 21, hasta ahora muy cercana a Apple, quiere mejorar su catálogo de protectores y ofrecer mejores materiales, así como un mayor número de fundas adaptadas.
El secreto de su éxito está en el uso de un material, un polímero, cuyo nombre técnico es D3o, que permite proteger a la vez que se adapta. Cuando siente calor, es casi líquido. Con los golpes, se hace rígido.
Es uno de l...
Proteger y adaptarse, esos son los dos retos de las fundas de móviles y tabletas. Diferentes plásticos y materiales lo intentan con diferente acierto. La firma inglesa Tech 21, hasta ahora muy cercana a Apple, quiere mejorar su catálogo de protectores y ofrecer mejores materiales, así como un mayor número de fundas adaptadas.
El secreto de su éxito está en el uso de un material, un polímero, cuyo nombre técnico es D3o, que permite proteger a la vez que se adapta. Cuando siente calor, es casi líquido. Con los golpes, se hace rígido.
Es uno de los muchos fabricantes que se dedican al negocio de los accesorios y, principalmente, al de las fundas, un bien más perecedero que el móvil y que el dueño suele cambiar cada cierto tiempo.