Se abren nuevos focos emisores en el volcán de La Palma: los científicos prevén la erupción más larga en 500 años
La sismicidad aumenta en las últimas horas, con medio centenar de terremotos desde la madrugada del domingo, tres de ellos de una magnitud de 3,5
El fin de la erupción del volcán de La Palma, por desgracia para los isleños, sigue estando lejano: “La previsión”, ha asegurado Francisco Prieto, técnico del Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca), “pasa, desgraciadamente, por que no finalice a corto plazo” y ha manifestado que “quizá lleguemos a superar” los 84 días de erupción del Tehuya (1646), el de mayor duración en los últimos 500 años en La Palma. Por ahora, ya dura 10 semanas.
El Instituto Geográfico Nacional empezó ...
El fin de la erupción del volcán de La Palma, por desgracia para los isleños, sigue estando lejano: “La previsión”, ha asegurado Francisco Prieto, técnico del Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca), “pasa, desgraciadamente, por que no finalice a corto plazo” y ha manifestado que “quizá lleguemos a superar” los 84 días de erupción del Tehuya (1646), el de mayor duración en los últimos 500 años en La Palma. Por ahora, ya dura 10 semanas.
El Instituto Geográfico Nacional empezó a apreciar a las tres de la madrugada del domingo, desde su punto de observación en el mirador de Tajuya (municipio de El Paso), la apertura de varios centros emisores de piroclastos incandescentes y lava en la ladera nordeste del volcán, según ha informado el vulcanólogo del Instituto Geográfico Nacional (IGN), Rubén López. Otro científico del IGN, en este caso el sismólogo Itahiza Domínguez, ha explicado que la nueva emisión de lava ha discurrido hacia el norte, para después bajar ladera abajo hacia el oeste.
La portavoz científica del Pevolca, María José Blanco, ha afirmado a mediodía del domingo que la lava que está brotando está discurriendo sobre todo por terreno ya hollado por la zona de Tacande (Los Llanos de Aridane), aunque también amenaza zonas cercanas a la Montaña de Todoque y puede afectar, de nuevo, a la localidad de La Laguna. El peligro de los nuevos puntos eruptivos es que las coladas que de ellos emanen desborden los cauces ya existentes y la lava afecte a nueva superficie. “La previsión por ahora es que siga yendo adherida a la colada anterior”, ha asegurado Francisco Prieto, técnico del Pevolca.
Respecto al sobresalto del jueves, cuando se abrieron un foco eruptivo y una fisura a las puertas de una vivienda desalojada, Prieto ha dicho que esperan “o que se paralice la emisión de lava o que se monte por otras lenguas anteriores”. La fisura quedó inactiva horas después de abrirse, pero antes de aquello, una lengua de lava que partía de esa zona tuvo tiempo de “hollar el cementerio de Las Manchas y una planta fotovoltaica”, además de muchas viviendas unifamiliares, según contó el viernes Miguel Ángel Morcuende, el director técnico del Pevolca.
La inestabilidad de la situación ha llevado al Cabildo de La Palma a cerrar el acceso a la zona de exclusión por el norte “debido a la evolución de la emergencia”. La nueva boca surgida el jueves, la fuerte caída de lluvias y la mala calidad del aire ya llevó a la Corporación isleña a impedir el acceso por el sur la pasada semana.
En las últimas horas, tanto la sismicidad como el tremor han experimentado un repunte. La isla ha sufrido desde la pasada medianoche medio centenar de terremotos, mayoritariamente en profundidades intermedias. Tres de ellos han podido ser sentidos por la población. Este trío de seísmos han presentado una magnitud de 3,5, uno de ellos con hipocentro (zona en el interior de la Tierra donde rompe la falla y desde donde se propagan las ondas sísmicas; el epicentro es el punto sobre la superficie terrestre directamente por encima del hipocentro) localizado en Fuencaliente, a 11 kilómetros de la superficie terrestre.
La población sintió el temblor con una intensidad máxima de III. La intensidad mide cómo perciben los ciudadanos y las infraestructuras cada movimiento. La escala en este caso va de I a XII, y un III es leve: las personas en reposo sienten un ligero balanceo o temblor. La magnitud, por su parte, barema la fuerza del terremoto, independientemente de cómo se sienta en la superficie.
El tremor, la huella sonora que deja el ascenso del magma y los gases a la superficie, también ha registrado un repunte en las últimas horas, según explica Rubén López, quien ha hablado de “una subida destacada”. Las emisiones de gases, sobre todo de dióxido de azufre, “han roto la tendencia descendiente”, ha explicado Prieto, si bien ha confiado en que se trate de un hecho puntual.
Reserva de plazas
Las navieras que operan entre La Palma y Tenerife y Gran Canaria contarán con plazas reservadas para todos aquellos palmeros que deban desplazarse de manera urgente para realizar diligencias o consultas médicas, según ha anunciado el presidente del Cabildo de La Palma, Mariano Hernández Zapata. Esta semana se ha sabido que cientos de pacientes palmeros no han podido trasladarse a las islas más grandes del archipiélago por el cierre del aeropuerto (ya operativo de nuevo) y la masiva llegada de turistas. El presidente ha explicado que ha estado en contacto con Naviera Armas y Fred Olsen para exponerles la preocupación de algunos palmeros por no poder desplazarse.
En la tarde del sábado, el viento giró hacia el oeste, algo beneficioso para las operaciones aéreas, pero que también tiene una parte mala: la calidad del aire en el Valle de Aridane (Los Llanos de Aridane, El Paso y Tazacorte) ha vuelto a empeorar. Lo ha hecho tanto en lo que respecta a la difusión de gases como en la de partículas de arena volcánica menores de diez micras.