Muere una persona en La Palma mientras llevaba a cabo tareas de limpieza
El fallecido, de 72 años, es la primera víctima mortal desde que comenzó la erupción el 19 de septiembre
Un hombre de 72 años ha fallecido mientras retiraba cenizas de su vivienda, situada dentro de la zona de exclusión provocada por el volcán de La Palma, en Los Llanos Aridane, según han informado fuentes cercanas al Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca). La persona fallecida es un vecino que contaba con autorización del dispositivo de emergencia para realizar labores de limpieza de cenizas y al que se echaba de menos desde este viernes, después de que las personas con permiso para acceder ...
Un hombre de 72 años ha fallecido mientras retiraba cenizas de su vivienda, situada dentro de la zona de exclusión provocada por el volcán de La Palma, en Los Llanos Aridane, según han informado fuentes cercanas al Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca). La persona fallecida es un vecino que contaba con autorización del dispositivo de emergencia para realizar labores de limpieza de cenizas y al que se echaba de menos desde este viernes, después de que las personas con permiso para acceder a la zona se hubieran retirado. El cadáver ha sido encontrado en una vivienda del barrio del Corazoncillo, situado en el límite entre Los Llanos de Aridane y El Paso. La Guardia Civil investiga si su muerte se debe a una caída del tejado mientras limpiaba la ceniza volcánica o a otras circunstancias.
“Desde el Plan Pevolca del Gobierno de Canarias”, ha asegurado el organismo en un comunicado, “reiteramos las normas establecidas para la limpieza de las viviendas, es decir, los vecinos solo deben acceder a las zonas de exclusión dentro del protocolo establecido: control exhaustivo de los ayuntamientos y limpiar solo aquellas azoteas que sean transitables para retirar cenizas y siempre con las medidas de autoprotección adecuadas”. El Pevolca recalca que “las pesquisas las está haciendo la Guardia Civil y en estos momentos” no resulta posible afirmar “cuáles son las causas ni las circunstancias del fallecimiento”.
“Hay personal profesional trabajando en labores de limpieza en todo momento”, ha explicado este mediodía el director técnico del Pevolca, Miguel Ángel Morcuende. “Pero es evidente que no se da abasto, y está claro que hay muchos vecinos que quieren limpiar sus cubiertas”, algo que se puede hacer “siguiendo los protocolos”. Morcuende, que ha trasladado sus condolencias a la familia del fallecido, ha manifestado que habrá que esperar a que “se realice la autopsia” para conocer las causas de la muerte de este vecino de La Palma, pero no se descarta que pudiera haber muerto “por asfixia al ser enterrado por las cenizas del tejado” desde el que supuestamente cayó mientras lo estaba limpiando.
El director técnico del Pevolca también ha incidido en que la limpieza de cubiertas es una actividad que se viene permitiendo desde que comenzó la acumulación de cenizas y se desarrolla en colaboración con los ayuntamientos. Los consistorios deben contar con un registro de las personas que van a realizar este trabajo, tener designado a un responsable correspondiente, y toda la información ha de ser facilitada a la Guardia Civil.
Sismicidad y ceniza en el día 56
La triste noticia se ha producido en el día 56 de vida del volcán de La Palma. Las coladas que emite el cono discurren fundamentalmente sobre el manto que dejaron las primeras, lo que minimiza los daños en las últimas horas y alimenta el delta lávico en la costa oeste. “Esa es una buena noticia, no tenemos desbordes ni derramamientos hacia otros puntos”, ha explicado el propio Morcuende. Según sus datos, el crecimiento de esta fajana, que ha acabado por completo con la playa de los Guirres, es la que ha provocado el crecimiento de 9,2 hectáreas de superficie afectada por las coladas, lo que significa un total de 1.018,7 hectáreas de las 70.830 que mide la isla.
Este sábado, la isla se ha levantado sobresaltada con otro sismo de magnitud 5 y una intensidad máxima de V en la escala europea (que llega a XII). Este evento, uno de los más fuertes entre los registrados desde el 19 de septiembre, no supone, sin embargo, que se haya incrementado la sismicidad. Más bien al contrario, según Morcuende y la portavoz del comité científico, María José Blanco. “La sismicidad continua en valores bajos”, han recordado ambos. Casi todos los terremotos que se producen suceden a grandes profundidades, superiores a 30 kilómetros, “pero en un número descendente”, según la vulcanóloga. “La sismicidad a profundidades intermedias se mantiene baja y no se registra sismicidad superficial”.
La mala calidad del aire, sin embargo, ha obligado al Cabildo de La Palma a paralizar la recogida de enseres en distintas localidades en el municipio de Fuencaliente. Destaca, sobre todo, la acción del dióxido de azufre y el repunte que se ha registrado en la emisión de partículas inferiores a 10 micras, es decir, la ceniza volcánica, sobre todo en Los Llanos de Aridane. Y eso, a pesar de que las condiciones meteorológicas están favoreciendo la dispersión de contaminantes.