La expareja de la menor desaparecida en Sevilla hace una semana confiesa que la ha matado y descuartizado
El presunto asesino de Rocío Caíz se ha entregado a la Guardia Civil y, tras confesar el crimen, ha dado la localización de los restos a los agentes
La Guardia Civil ha recuperado el cuerpo sin vida de Rocío Caíz, la menor de 17 años que llevaba desaparecida de su casa, en la localidad sevillana de Martín de la Jara, desde el pasado 3 de junio. Su expareja, de 23 años, se ha entregado este jueves a la Guardia Civil, ante la que ha confesado que él la había matado y descuartizado, así como que se había deshecho del cuerpo en un aparcamiento de la vecina localidad de Estepa, hasta donde ha conducido a los agentes, según indican fuentes de la investigación. Una portavo...
La Guardia Civil ha recuperado el cuerpo sin vida de Rocío Caíz, la menor de 17 años que llevaba desaparecida de su casa, en la localidad sevillana de Martín de la Jara, desde el pasado 3 de junio. Su expareja, de 23 años, se ha entregado este jueves a la Guardia Civil, ante la que ha confesado que él la había matado y descuartizado, así como que se había deshecho del cuerpo en un aparcamiento de la vecina localidad de Estepa, hasta donde ha conducido a los agentes, según indican fuentes de la investigación. Una portavoz del instituto armado ha confirmado a este diario que se ha procedido al levantamiento del cadáver en Estepa, donde residía el asesino confeso.
La joven y su supuesto asesino tenían un hijo de cuatro meses, pero habían decidido romper la relación. De hecho, de acuerdo con las declaraciones que la madre de la chica había realizado a los medios de comunicación en los últimos días, ella había decidido abandonar la casa en la que vivían en Estepa, para regresar con su familia. Su hermana, además, denunció el pasado lunes en un vídeo que se hizo viral en redes sociales que Caíz había sufrido malos tratos a manos de su expareja.
El último en ver a la chica con vida fue el taxista que la llevó desde Martín de la Jara a Estepa —a 28 kilómetros de distancia—, hasta donde supuestamente había ido para recoger cosas de la vivienda que había compartido con quien a la postre ha sido su presunto asesino. Al día siguiente de su desaparición, su exnovio se puso en contacto con la familia para decirle que se había marchado de la casa de madrugada, según han relatado en los medios de comunicación, que se había llevado 300 euros y que no sabía nada más de ella. Sus padres llegaron incluso a recibir un mensaje en el que Caíz les comunicaba que se había marchado con otro hombre al que había conocido, pero ninguno de sus familiares dio verosimilitud a esa comunicación.
Finalmente, su expareja es quien se ha dirigido esta tarde a la Guardia Civil y ha confesado que mató a la chica y que descuartizó su cuerpo y luego se deshizo de él en un aparcamiento de Estepa, cuya localización ha facilitado a los investigadores. Desde que se denunció el caso, los agentes mantenían todas las hipótesis abiertas y se habían centrado en el cotejo y seguimiento de las últimas llamadas realizadas por la joven.