Un restaurante echa a una madre por amamantar a su hija
La mujer tuvo que darle de comer en una parada del autobús en el centro de Barcelona
Una mujer fue expulsada de un restaurante de Barcelona cuando accedió al local con la intención de dar de mamar a su bebé. Según publica La Vanguardia, Norma Abril se encontraba en el paseo de Gracia cuando su hija Mireia comenzó a llorar. Entró en un restaurante para darle de comer porque hacía frío pero el encargado se lo prohibió.
A pesar de que Norma Abril expresó su intención de consumir algo en el local, el responsable de Txapela, restaurante situado en el paseo de Gracia de Barcelona, le prohibió su entrada. La mujer tuvo que sentarse en la marquesina de la parada del au...
Una mujer fue expulsada de un restaurante de Barcelona cuando accedió al local con la intención de dar de mamar a su bebé. Según publica La Vanguardia, Norma Abril se encontraba en el paseo de Gracia cuando su hija Mireia comenzó a llorar. Entró en un restaurante para darle de comer porque hacía frío pero el encargado se lo prohibió.
A pesar de que Norma Abril expresó su intención de consumir algo en el local, el responsable de Txapela, restaurante situado en el paseo de Gracia de Barcelona, le prohibió su entrada. La mujer tuvo que sentarse en la marquesina de la parada del autobús 47 para darle de comer a su bebé, de seis meses, ante su incesante llanto.
Todo sucedió el pasado 30 de noviembre, y según declaraciones de la mujer al periódico La Vanguardia, el responsable del restaurante le llegó a ofrecer el lavabo para alimentar a la niña, a lo cual Norma se negó.
El grupo Artemi Nolla, al que pertenece el restaurante Txapela, ha remitido un comunicado a La Vanguardia, en el que pide disculpas a Norma y a su hija. Y en el que asegura haber tomado "medidas internas tanto con la persona que lo motivó como con el resto del equipo para que no vuelva a producirse nada parecido".
Por su parte, la Federació Catalana de Grups de Suport a la Lactància Materna, ente que se dedica al fomento, el apoyo y la orientación a la madre que opta por este tipo de crianza, ha lamentado el hecho y ha felicitado al grupo de restauración por las medidas tomadas contra el encargado del local.
Pero, además, a la mujer se le negó el derecho a usar una hoja de reclamación del restaurante. "No me la dio porque no había consumido y decía que, por tanto, no era cliente", ha comentado Norma a La Vanguardia.