Las autoridades investigan la muerte de una mujer tras vacunarse contra la viruela en EE UU
Otras seis personas sufren importantes efectos secundarios, todos los afectados tenían antecedentes de problemas cardiacos
Las autoridades de la Salud de EE UU han iniciado una investigación sobre la muerte de una enfermera que este mes fue vacunada contra la viruela. También se investigan los efectos secundarios que están padeciendo otros seis vacunados. De momento, la Agencia Federal de Salud, ha ordenado que nadie con antecedentes de problemas cardiacos sea vacunado.
"No hay nada que sugiera en este momento que haya sido una muerte anormal", ha dicho Susan Allen, directora de salud del condado de Arlington. "En estos momentos no hay razón para creer que exista una relación causal entre la vacuna contra l...
Las autoridades de la Salud de EE UU han iniciado una investigación sobre la muerte de una enfermera que este mes fue vacunada contra la viruela. También se investigan los efectos secundarios que están padeciendo otros seis vacunados. De momento, la Agencia Federal de Salud, ha ordenado que nadie con antecedentes de problemas cardiacos sea vacunado.
"No hay nada que sugiera en este momento que haya sido una muerte anormal", ha dicho Susan Allen, directora de salud del condado de Arlington. "En estos momentos no hay razón para creer que exista una relación causal entre la vacuna contra la viruela y su muerte", ha agregado.
Las vacunaciones contra la enfermedad, que fue erradicada hace más de dos décadas, se iniciaron ante la amenaza de un ataque terrorista con armas biológicas que pudieran contener el virus.
Esa campaña de vacunaciones debía iniciarse con la inoculación a personas vinculadas a la atención médica, como enfermeras o médicos, pero hasta ahora sólo 21.000 trabajadores de la salud han acatado el llamamiento del presidente de EE UU, George W. Bush, a vacunarse, según fuentes del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
Más riesgos que beneficios
Según informa el diario The Washington Post en su edición de Internet, muchos médicos y enfermeras han rehusado vacunarse debido a que los beneficios son superados por los peligros que representa la inoculación.
Agrega que por cada millón de personas vacunadas hasta 1980, una o dos murieron y más de 50 sufrieron complicaciones graves, entre ellas fiebre, malestar y en algunos casos inflamación cerebral o ceguera.