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Ni Miley Cyrus ni Rosalía: estas son las artistas a las que tienes que ver en el Primavera Sound

Elevar el talento femenino en la música a un primer plano: este año, más de la mitad de los 226 nombres del cartel del Primavera Sound son mujeres.

Neneh Cherry: la precursora Neneh Cherry ha sido precursora de tantas cosas que la industria debería extenderle un cheque en blanco por todo lo que nos ha legado. Su himno Woman, grabado cuando vivía en Málaga a mediados de los 90 (recordemos "This is a woman’s world / this is my world…”), sigue a años luz de la mayoría de los tímidos alegatos feministas que se han firmado en el pop posteriormente. La hija del trompetista Don Cherry adelantó todo lo que sería el trip hop con Raw like sushi (1989), aquel debut musical cuyo 30 aniversario celebramos. De hecho, fue Cherry quien animó a Massive Attack a arrancar su carrera, cediéndoles el salón de su casa para que grabaran su primer disco, Blue lines (1991). La moda también está en deuda con ella. Se erigió como uno de los máximos iconos del movimiento Buffalo concebido por su amigo el malogrado estilista Ray Petri, que cambió el mapa de las revistas de moda para siempre al mezclar alta costura con prendas deportivas, multiculturalidad con androginia, el estilo cowboy con las botas Dr Martens. Su presencia destacada en el Primavera Sound tiene algo de "comebackazo" y también de justicia poética. Frente a la escasa politización de las nuevas generaciones, Cherry acude a presentar Broken politics (2018), el segundo disco que produce junto al mago del collage sonoro Four Tet, en el que denuncia desde la crisis de los refugiados (ella misma ejerció de voluntaria en el campo de inmigrantes de Calais en 2017) hasta el peligroso ascenso de la ultraderecha en su país natal (Suecia). Porque un rato de discurso no está reñido con la fiesta. Sábado 1 de junio – Escenario Pitchfork – 23h.Astrid Stawiarz (Getty Images for BAM)
Julia Holter: la avanzadilla arty Aspirantes a ocupar el trono del avant-pop (o pop de vanguardia) hay muchos. Estamos hablando, probablemente, de la más reñida y elitista de las categorías musicales. Esa donde se cruzan el virtuosismo musical, el rupturismo melódico, lo voluntariosamente raro. Y, por qué no decirlo, el esnobismo. Esta artista de Los Ángeles es de las que ponen a la crítica e invitan a hablar en superlativos. Si con su anterior disco, Have you in my wilderness, practicó un pop de cámara llamado a allanarle el camino hacia territorios mainstream, Holter, por si acaso, se ha desmarcado tomando la senda más experimental posible en su escalada hacia los altares arty. Aviary es, sin discusión, uno de los álbumes más intrigantes del año pasado (y a ratos, todo hay que decirlo, más irritantes y obtusos). Un asalto maximalista de 90 minutos donde todo cabe: orgías de gaitas, cantos budistas tibetanos, reminiscencias medievales, fraseos en latín, elevadas referencias literarias. Belleza y caos, épica e intimismo, intensidad y desprejuicio. Ya estuvo en el Primavera Sound hace unos años y acude crecida para reventar el recogimiento al que invita el escenario del Auditorio. Viernes 31 de mayo – Auditori Rockdelux – 19:20h.Burak Cingi (Redferns)
Janelle Monáe: magia negra El personaje del androide pop que se inventó para sus primeros discos ha permitido a Janelle Monáe jugar a ocultar su auténtico yo tras un alias. Hasta hoy. Gracias a Dirty computer, posiblemente su trabajo más redondo hasta la fecha, suma a su visión afrofuturista del R&B las declaraciones más explícitas y personales. Con motivo de su lanzamiento, salía oficialmente del armario en la revista Rolling Stone, exponiendo la necesidad de mostrarse como “una mujer queer negra en EE UU, alguien que ha tenido relaciones con hombres y mujeres y, finalmente, se ha descubierto como pansexual”. Quizás por eso aquella polvorilla que repartía sus movimientos espasmódicos sobre el escenario enfundada en esmoquin blanco y negro y coronada por un vertiginoso tupé ha aprendido a sofisticar aún más su discurso tanto sonoro como estético. Tal y como proclamaba en una entrevista a este diario: “Es mi responsabilidad como artista lanzar un mensaje contra el sexismo, la discriminación de las minorías o la esclavitud en la industria de la música”. En esta ocasión, sus reflexiones se centran en la sexualidad femenina en la era post #MeToo con frases tan reveladoras como “Ahora es la vagina la que va a tener su monólogo” (Django Jane) o “Me dicen que me cubra los pezones, mientras bloquean la igualdad salarial” (Screwed). Como para no corearlas. Viernes 31 de mayo – Escenario Pull&Bear – 21:35h.Timothy Norris (Getty Images for Coachella)
Kate Tempest: spoken word frente al caos Pocas voces espolean nuestra conciencia política actualmente como esta británica. Buena parte del planeta supo de ella gracias a Let them eat chaos, un álbum narrado bajo la perspectiva de siete personajes insomnes diferentes en la Inglaterra del Brexit con himnos tan lúcidos como Europe is lost, donde diseccionaba toda la enfermedad y alienación a la que nos someten la clase política y las grandes corporaciones. En apenas seis años, ha producido dos discos, una novela, una obra de teatro, un volumen de poesía y una revolucionaria pieza escénica de spoken word que le ha valido el premio Ted Hughes. Su particular sentido de la narrativa y el fraseo cockney con que impregna sus aproximaciones al hip hop la han convertido en una artista única y necesaria. Difícilmente va a poder verse en todo el festival a otro artista que cuente en su santuario con nombres como Samuel Beckett, James Joyce, W. B. Yeats, William Blake, W. H. Auden y Wu-Tang Clan. No importa quién esté tocando a esa hora en otro escenario: esta es una cita obligada en el programa. Viernes 31 de mayo – Escenario Ray-Ban – 00:55h.NurPhoto (NurPhoto via Getty Images)
SOPHIE: transmutación sonora Durante años, Sophie Xeon, nacida como Samuel Long, se presentó al mundo sin presentarse. En sus sesiones y lives, se mantenía a oscuras tras el escenario mientras alguien se hacía pasar por él de cara al público. Decimos ‘él’ porque el halo de misterio que rodeaba su figura solo se rompió el día en el que se presentó en un videoclip renacida como mujer, planteando todo un debate sobre la (escasa) presencia de los transexuales en la cultura pop. Debate que (ahora sí) a ella le aburre. Restringir su identidad de género resulta igualmente difícil al describir su música. Ella ha dicho que los sonidos que emplea en sus canciones “imitan el látex, los globos, las pompas, el metal, el plástico y cualquier cosa elástica”. La realidad es que ha sabido jugar a dar un barniz de extrañeza y artificialidad al pop electrónico que le permite tanto seducir a buscadores de credibilidad (como Madonna o Charli XCX, a quienes ha producido) como a degustadores de experiencias sonoras poliédricas. De nuevo: ignoren a quién esté en otro escenario, SOPHIE es la única que puede rebasar los confines de nuestra mente a esas horas. Jueves 30 de mayo – Escenario Lotus – 00:50h.Scott Dudelson (Getty Images for Coachella)
Erykah Badu: reina afro En un cartel que hace particular justicia a la mujer racial, la presencia de Erykah Badu se antoja necesaria. Mientras muchas otras andan reivindicando el soul y el R&B desde un ángulo más o menos blandito, la reina de las pelucas mantiene su activismo con el género desde hace más de dos décadas. También su espíritu belicoso. A pesar de su escasísima actividad discográfica en la última década (apenas alguna mixtape), la renovadora del soul nos ha ido entregando puntualmente polémicas con las que mantenerse en el campo de juego. La hemos visto detenida por aparecer desnudar en una plaza de Dallas para un vídeo, actuar para el tirano que rige la diminuta Suazilandia (la última monarquía absoluta de África) por 100.000 dólares y defender en público a los abusadores sexuales Bill Cosby y R. Kelly. Jueves 30 de mayo – Escenario Pull&Bear – 00:30h.Bennett Raglin (Getty Images for BET)
Fka Twigs: renacimiento temprano Hace un año, Tahliah Debrett Barnett, conocida por el mundo como FKA Twigs, contó que le habían extirpado seis tumores del útero. Una revelación infrecuente, particularmente para una artista obsesionada con su privacidad tras haberse topado involuntariamente con las sobreexposición mediática debido a su noviazgo con el actor Robert Pattinson (atención que mantiene, por cierto, por su actual relación con Shia LaBeouf). El proceso de recuperación tras la intervención quirúrgica ha servido a la cantante inglesa para replantearse la relación con su cuerpo y su manera de entender el arte. Convirtió sus sesiones de pole dance en una sanadora rutina que le ha permitido también evolucionar hacia otra parte en los ralentizados movimientos que cultiva en escena. Traerá algunas de las canciones que cocina para su nuevo disco. Aunque por los adelantos que ya hemos visto, esperamos encontrarnos de nuevo con una buena dosis de suspiros y sonidos acolchados. Perfecto para irse después a dormir y descansar la primera jornada. Jueves 30 de mayo – Escenario Ray-Ban – 02:50h.Matthew Baker (Getty Images)
Solange: la hermanísima Quienes la vieron en su visita hace un par de años al Primavera Sound se encontraron a una artista desinflada en escena. O, más bien, hinchadísima por todas las expectativas puestas en ella. Durante años Solange ha vivido al filo de quedarse en la Mónica Cruz del pop, buscando su sitio (y el éxito) bajo la prolongadísima sombra de su hermana, Beyoncé. Quizás por eso, frente al chorrazo y poderío de Beyoncé, en sus dos últimos discos Solange ha adoptado una clave low-key, musitando un soul retrofuturista lo suficientemente alternativo como para convencer a la crítica pero sin pasarse de raruno para no dejar atrás su sueño de un estrellato masivo. Esta vez sube al escenario grande en horario de máxima audiencia. Confiemos en que sepa llenarlo. Sábado 1 de junio – Escenario Seat – 23h.Carla Speight (WireImage)
TIRZAH: en otro tempo Hay algo en el debut de Tirzah Mastin que invita a pensar en una pista de baile vacía o un dormitorio lleno. Concebido desde quien ha asimilado los sonidos de club (garaje, grime, R&B, dance), está destinado a degustarse de manera muy privada. La londinense se alzó como uno de los hypes del año pasado gracias a sus construcciones sonoras downtempo entre el soul deconstruido y la ensoñación synth-folk. Nada sería posible sin la compañía (en la producción y en directo) de su amiga Mica Levi, reconocida por bandas sonoras para películas como Under the skin o Jackie (que le valió una nominación al Oscar). Sucia y brillante, triste y esperanzadora, íntima y exhibicionista… La música de Tirzah podría pasar por música de fondo hasta que te encuentras dándole de nuevo al play. La cita perezosa de la tarde. Sábado 1 de junio – Escenario Living Primavera by IKEA – 23h. / Auditori Rockdelux – 17:30h.Burak Cingi (Redferns)
Roisin Murphy: una fantasía A la ex Moloko le agradecemos sobre todo dos cosas: su voluntad por mantenernos siempre bailando y su capacidad para sorprendernos una y otra vez con los looks más imposibles y salir siempre indemne. Y cuando decimos una y otra vez nos referimos también a sus directos. Murphy pasa casi tanto tiempo en sus conciertos entregándonos su voz de sedosa como cambiándose a toda velocidad a un lado del escenario. Es capaz de disfrazarse de cuadro de luces por gentileza de sus amigos Viktor&Rolf como de ponerse algo literalmente sacado de la basura. Y dignificarlo todo. Lo mismo le pasa con sus temas. No importa que acuda a un tema de dance pop infeccioso o revisite la era italodisco (en compañía de su marido, el productor milanés Sebastiano Properzi). El resultado siempre es el mismo: cuerpos cimbreantes y caras sonrientes en el foso. Un momento buenrrollista necesario en un festival con artistas con tendencia a la intensidad. Sábado 1 de junio – Escenario Primavera – 02:35h.Gordon Stabbins (Getty Images)
Helena Hauff: el rodillo techno Cada vez que pensamos en un rodillo techno, imaginamos a un tipo escuálido y sudoroso tras los mandos. Que una veinteañera se cuele entre los popes del género con apenas un par de discos todavía resulta, lamentablemente, una hazaña reseñable. Como esta alemana declaraba a The Guardian recientemente: “Cada mujer que se hace visible tras los platos contribuye a cambiar mentalidades”. En un mundo donde el beat importa más que la cara, la suya tampoco necesita mayor visibilidad que Qualm, un álbum oscuro, hipnótico y espartano aclamado entre lo mejor de 2018 donde copulan acid, EBM y minimalismo coldwave. Helena Hauff pasa de ordenadores para extraer las máximas virtudes analógicas de cajas de ritmos y sintetizadores Roland ochenteros. Joyas vintage de las que destila un sonido elegante y sucio a la vez que mira al futuro. Lo-fi pensado para escucharse en amplis gigantes antes de que empiece a clarear la mañana. Quien tenga poco, la noche anterior a las 4h. en el escenario Ray-Ban tiene también a Nina Kraviz, la reina rusa del taladro. Viernes 31 de mayo – Escenario Desperados Cube – 4h.Julian Bajsel
Kali Uchis: la vida en chicle Se presentó como una especie de barbie trap de Los Ángeles, con un R&B tan blando, edulcorado y poco consistente como un globo de chicle. Todo hacía presagiar que podía quedarse en un producto de temporada… Pero supo generar infalibles alianzas con artistas de la talla de Tyler The Creator, Diplo, Snoop Dogg, Gorillaz, Bootsy Collins y hasta Juanes (ella también es de origen colombiano). A pesar de practicar un soul nostálgico, dulzón y ensoñador aprendió sus maneras en la calle, donde acabó viviendo una temporada con 17 años tras una bronca con su padre. Ahora, a los 24, su disco Isolation la ha consagrado como un solvente recambio en el género. Esperamos que no se olvide de cantarnos su particular versión de Por qué te vas, de Jeanette. Sábado 1 de junio – Escenario Seat – 20:45h.Andrew Chin (Getty Images)