“Cristóbal Balenciaga jamás diseñó zapatos”: así es el calzado que 25 firmas españolas han ideado para sus prendas

“Sus creaciones son atemporales y queremos mostrar cómo se complementan a la perfección con calzado actual”, explica Javier Echeverría Sola, comisario de la exposición ‘Balenciaga | Shoes from Spain Tribute’, la primera monográfica dedicada al maestro de Getaria en Italia

Boceto y prendas que forman parte de la exposición 'Balenciaga | Shoes from Spain Tribute'. En el centro, retrato de Cristóbal Balenciaga de 1927.Montaje realizado con fotos de Manuel Outumuro, Jon Cazenave, Getty Images

Cristóbal Balenciaga (Getaria, 1895-Jávea, 1972) dejó huella en la historia de la moda, pero no diseñaba zapatos. Partiendo de esa premisa, la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE), en colaboración con el ICEX, ha inaugurado este viernes la exposición Balenciaga | Shoes from Spain Tribute, que podrá visitarse hasta el 2 de marzo. “Se trata de la primera monográfica del diseñador en Italia y se hace en la capital de la moda, Milán”, explica con orgullo el comisario de la muestra, Javier Echeverría Sola. La exposición, que acoge el céntrico Palazzo Morando, coincidirá con la celebración de la semana de la moda de la ciudad (del 25 de febrero al 3 de marzo). “Eso ha provocado que haya mucha expectación”, subraya el comisario, que ha querido presentar la obra del creador de Getaria “poniendo en valor la artesanía y el saber hacer de la industria del calzado española para mostrar a un Balenciaga totalmente contemporáneo”. Para ello, 25 firmas han diseñado zapatos que acompañan a 25 conjuntos originales del diseñador, que han sido cedidos para esta muestra por museos y coleccionistas. La mayoría son prendas de fiesta o de cóctel, y destacan piezas como un vestido de novia bordado (de la Colección Sonsoles Diez de Rivera y de Icaza) y la capa en color frambuesa que la reina Letizia lució en la fotografía oficial realizada por Annie Leibovitz que se dio a conocer el pasado noviembre.

Zapatos y boceto creados para la exposición por Martinelli y Ángeles Espinar. Entre ellos, diseño de 1962 de Cristóbal Balenciaga, conjunto de noche de vestido en gazar de seda color marfil y abrigo-capa en color frambuesa de la Col·lecció Antoni de Montpalau.Montaje realizado con fotos de Jon Cazenave, Juan Carlos Vega

“Las creaciones de Cristóbal Balenciaga son atemporales y queremos mostrar cómo se complementan a la perfección con calzado actual”, recalca Echeverría. Destaca, además, que un zapato puede cambiar por completo un estilismo: “En los pases de modelos que hacía Balenciaga ellas llevaban un zapato básico, negro o blanco, de la época. Viendo fotos, por el zapato y el peinado de la modelo, adivinas de qué año es, pero si ves el diseño solo es atemporal”. Recuerda que “los desfiles que hacía eran a puerta cerrada, en completo silencio, y él jamás diseñó zapatos ni tuvo un colaborador de confianza como en el caso de Dior, que trabajaba con Roger Vivier o, en otras épocas, con Ferragamo”. Lo que sí hacía el de Getaria era facilitar a sus fieles compradoras un extra de tejido para que forraran los zapatos y bolsos con los que complementaban los conjuntos que hacía para ellas: “Por ejemplo, el caso de Bunny Mellon, él le mandaba incluso un libro con los bocetos de las colecciones a Estados Unidos. Era una de las mejores clientas y elegía el mismo modelo en distintos colores para tener uno en cada una de sus casas, en Los Ángeles, Nueva York y París".

Vestido de novia en shantung de seda bordado, creado en 1957, parte de la Colección Sonsoles Diez de Rivera y de Icaza, procedente del Museo Cristóbal Balenciaga de Getaria. Manuel Outumuro

La fascinación por el diseñador vasco no ha decaído 53 años después de su fallecimiento. Series de televisión y exposiciones temáticas han desentrañado su enigmática figura y mostrado su legado en los últimos tiempos. “Esta exposición es un homenaje que realiza el calzado español al maestro español de la alta costura, que ha sido una inspiración para todo el sector por todos los valores que compartimos: saber hacer, tradición, artesanía e innovación”, explica el comisario. De hecho, la artesanía es central en la muestra, porque siete talleres de artesanos han participado en la colaboración de algunos diseños, que incorporan los bordados de Ángeles Espinar, Corina Roselló, Jesús Rosado y Francisco Carrera Paquili; el bordado de encajes y mantillas de Encarnita Berrio; las flores hechas a mano por Mariana Barturen o piezas metálicas creadas por la escultora Teresa de la Pisa. “Barturen ha trabajado con los troqueles y los patrones originales de los años treinta y cuarenta de las flores del taller que le hacía las flores a Balenciaga”, precisa Echeverría. La idea del comisario ha sido “presentar en la exposición un total look de 2025, que se pueda ver como una concatenación de escaparates de una gran calle comercial, como Serrano o Via Montenapoleone, en la que el vestido es original de Balenciaga y el zapato es actual, hecho ex profeso para la exposición”.

Zapatos y boceto de Creaciones S.W. y Paquili, inspirados en la torera diseñada en 1947 por Cristóbal Balenciaga, parte de la Colección Sonsoles Diez de Rivera y de Icaza. Montaje realizado con fotos de Manuel Outumuro, Juan Carlos Vega

Mostrar de una forma diferente las creaciones del diseñador —cedidas por museos como el Cristóbal Balenciaga de Getaria o el del Traje de Madrid y procedentes de colecciones como la de Sonsoles Diez de Rivera y de Icaza, López-Trabado o Teresa Berganza— ha sido el empeño del comisario para este desembarco en Milán: “En las exposiciones, siempre se ha presentado un Balenciaga en orden cronológico, por un lado, o un Balenciaga mirando al pasado, buscando en qué se inspiró, yendo hacia atrás. En cambio, este homenaje pone en valor, además de la artesanía y el saber hacer del calzado, a un Balenciaga totalmente contemporáneo. Él es atemporal: cerró sus talleres en el año 68, este año hubiera cumplido 130 años, pero si ves sus creaciones no sabrías si son del año 39, del 55 o del 2025. Y eso solo ocurre con Balenciaga”.

Más de 100 compañías se presentaron al concurso para participar en este proyecto, y 25 fueron las seleccionadas por un jurado de expertos españoles e italianos (Alhamas, Alohas, Casteller, Chie Mihara, Creaciones SW, Defloresyfloreros, Flabelus, Gaimo, Hispanitas, Kanna, Lottusse, Magnanni, Magrit, Martinelli, Mascaró, Pedro García, Pedro Miralles, Pertini, Pikolinos, Pitillos, Pons Quintana, Pretty Ballerinas, RAS, Ria Menorca y Zinda). Cuando anunció la exposición en diciembre, la consejera delegada del ICEX, Elisa Carbonell, destacó el peso de la exportación de calzado en España, subrayando que es el segundo país, junto a Italia, en producción y exportación de calzado y que el sector genera más de 6.500 empleos directos en La Rioja, Castilla-La Mancha, Baleares y Valencia. “Es un sector presente en todo el mundo, en los mejores escaparates se ve calzado hecho en España”, asegura Echeverría, “y este es un merecido homenaje también a ese saber hacer”.

Javier Echeverría Sola, comisario de la exposición. Juan Carlos Vega


Sobre la firma

Más información

Archivado En