Casado se ofrece frente a la ‘vía Iceta’ de pactos del PSOE con Podemos y ERC

El primero que se toma el 26-M como una revancha política y casi personal con respecto a sus malos resultados el 28-A es Pablo Casado. El líder del PP ha presentado este viernes en Zaragoza el programa marco de su partido para las elecciones europeas que coinciden también el 26 de mayo, y ha aprovechado para descalificar el triunfo del PSOE como "una victoria escasa" y para advertir a todos los votante...

El primero que se toma el 26-M como una revancha política y casi personal con respecto a sus malos resultados el 28-A es Pablo Casado. El líder del PP ha presentado este viernes en Zaragoza el programa marco de su partido para las elecciones europeas que coinciden también el 26 de mayo, y ha aprovechado para descalificar el triunfo del PSOE como "una victoria escasa" y para advertir a todos los votantes de centro derecha que se les marcharon el 28-A a otras formaciones de que ahora deben corregir el rumbo para no "dar otro aval" o "espaldarazo" a Pedro Sánchez para que extienda la que denominó "vía Iceta" de pactos seguros del PSOE con Podemos y ERC al ámbito local.

Pablo Casado está ocupado en esta nueva campaña en no enfangarse demasiado en la definición ideológica o espacial del PP, sobre si es de centro, de derechas o de centro derecha, y en enfatizar que su partido es una formación unida, ante las voces críticas que están empezando a surgir todavía solapadamente en su seno.

Lo que sí ha querido es propagar la idea de que Pedro Sánchez sigue con su plan de prodigar gestos y llamadas al entorno nacionalista y separatista en Cataluña para que le faciliten su gobierno e investidura y ha catalogado en ese sentido "la vía Iceta" de proponer al dirigente del PSC para presidir el Senado. Es ahí cuando ha dicho que "todo apunta" a que la vía de propugnar a Miquel Iceta para ese cargo es un "gesto para recibir el apoyo y seguir gobernando". Y ha sido entonces cuando ha hecho un llamamiento a todos los votantes del PP fugados a Vox o Ciudadanos para que no lo permitan y rectifiquen su voto de castigo.

El dirigente del PP ha vuelto a presentarse como el necesario "contrapeso" para "no dar autopista libre" a Pedro Sánchez para pactar con cualquiera. Y ha recogido parte de los datos del CIS catalán conocido este viernes para asegurar que la mayoría de los catalanes no están a favor de la independencia.

Casado ha aprovechado así para emplazar a Ciudadanos a que diga ya ahora, cuanto antes, "si va a apoyar a algún candidato socialista" a la alcaldía o la presidencia de una autonomía. Y ha apuntado que ahí no le debe valer al líder de Ciudadanos, Albert Rivera, hablar del "pedigrí" de unos socialistas más auténticos o "disidentes" frente a otros "pata negra" porque todos les parecen lo mismo: miembros del partido de Pedro Sánchez.