Sí es necesario saber inglés

Como profesora de inglés en España durante más de 50 años, me apena la ligereza con que el candidato a la presidencia del Gobierno trata el asunto de su problema con dicho idioma. Feijóo admite su carencia en hablar inglés pero a la vez quita importancia al asunto diciendo que cuando vaya a alguna reunión donde la lengua vernácula sea inglés, siempre habrá traductores. Siento disentir: no es lo mismo. Los idiomas tienen muchos matices y muchas veces el verdadero sentido de las palabras ...

Como profesora de inglés en España durante más de 50 años, me apena la ligereza con que el candidato a la presidencia del Gobierno trata el asunto de su problema con dicho idioma. Feijóo admite su carencia en hablar inglés pero a la vez quita importancia al asunto diciendo que cuando vaya a alguna reunión donde la lengua vernácula sea inglés, siempre habrá traductores. Siento disentir: no es lo mismo. Los idiomas tienen muchos matices y muchas veces el verdadero sentido de las palabras puede perderse con la traducción. Cuando uno viaja al extranjero, saber hablar el idioma del lugar te abre horizontes, te permite profundizar en su cultura y, por supuesto, conocer a su gente. Para relacionarte con otros mandatarios y tener un verdadero vínculo de amistad y mutuo respeto es necesario hablar el mismo idioma sin traductores por medio. Además, ¿qué mensaje mandamos a nuestros jóvenes que estudian un idioma con ilusión diciéndoles que no importa porque todo se puede traducir?

Charlotte Stern Barkerding. Murcia

Trabajo infantil

Durante estos días de ruido incesante, ha pasado casi desapercibida una noticia de extrema gravedad: el PP y Vox han votado en el Parlamento Europeo contra una propuesta de ley que pretende acabar con la explotación laboral y el trabajo infantil. Esto ocurre cuando se estima que unos 25 millones de personas en el mundo están sometidas a trabajos forzosos u obligatorios y 160 millones de niños a trabajo infantil. El argumento es que la ley puede perjudicar a las pymes. En primer lugar, no es cierto, puesto que obliga a las grandes compañías y, en segundo, ¿acaso el respeto a los derechos humanos en el mundo laboral depende del tamaño de la empresa? ¿Estamos en el siglo XXI o en el XIX?

Enrique Chicote Serna. Arganda del Rey (Madrid)

Una posible solución

Creo que la solución al drama de la vivienda pasa por los siguientes puntos: establecimiento de precios máximos por metro cuadrado en compra o alquiler, obligación de los bancos de conceder hipoteca al 100% para una primera vivienda hasta un determinado tope económico, establecer la dación en pago, desincentivar fiscalmente la inversión y prohibir la compra de inmuebles a personas que no puedan demostrar que van a vivir en ellas, con los controles funcionariales correspondientes. El alquiler debe existir para cuando alguien no va a permanecer en una población más que durante un tiempo limitado. Hace falta volver a dirigir el mercado a usuarios finales, no a inversores. Nos jugamos la paz social.

Lluís Paloma Sánchez. Terrassa (Barcelona)

Me alegro de vivir así

¿Sabéis lo que os digo? Me alegro de no entender los resultados electorales. Soy muy consciente de que mi vida personal y profesional se ubica en una atmosfera sesgada y que vivo alejada de esa cantidad ingente de votos que prefiere lo privado a lo público, la libertad frente a la cultura, el turismo frente a los hogares... Hay quien pueda pensar que prefiero ser ignorante y no conocer a los que me rodean, pero también se puede interpretar como que pese a todo sigo teniendo esperanza en esta sociedad. No entender los resultados me permite ver un rayo de luz.

Alicia Carrión García. Valencia