El destino incierto del anillo de compromiso de Belinda tras la ruptura con Christian Nodal

La ruptura amorosa entre los cantantes Belinda y Christian Nodal se ha convertido en el tema del momento. Desde hace semanas se rumoraba de los problemas entre la pareja, pero la cancelación de la boda fue confirmada un día antes de San Valentín. El drama ha llegado hasta el debate sobre si la artista española –naturalizada mexicana– debe o no devolver el anillo de compromiso que Nodal le entregó en mayo pasado, valorado en más de tres millones de dólares (unos 60 millones de pesos).

La polémica inició luego de que la conductora Galilea Montijo comentó en el programa de televisión Hoy que Belinda debería quedarse con la costosa joya. “Yo siempre he dicho, los anillos no se regresan, las piedras se quedan, los hombres se van. A mí me pidieron un día el anillo y le dije ‘con gusto’ y se lo lancé en la cara… lo que se da ya no se quita”, dijo y las redes sociales estallaron.

Más allá de la tradición de devolver el anillo en caso del rompimiento del compromiso, Belinda no está obligada a hacerlo, al menos que su exnovio se lo pida. El Código Civil de Ciudad de México establece que los futuros cónyuges pueden solicitar de vuelta “las donaciones antenupciales”. “Los donantes tienen el derecho de exigir la devolución de lo que hubieren dado con motivo del matrimonio a partir del momento en que tuvo conocimiento de la no celebración de este”, indica el artículo 230 del código de la capital, aunque la normativa pueden variar dependiendo del Estado en el que se interpusiera una demanda.

En caso de conservar la joya, la intérprete de Luz Sin Gravedad deberá pagar alrededor de un tercio de su valor en impuestos. La ley del Impuesto sobre la Renta (ISR) señala que las donaciones que excedan los 600.000 pesos están obligadas a pagar un gravamen, que en este caso, puede alcanzar los 21 millones de pesos (cerca de un millón de dólares). La evasión de impuestos no es un tema nuevo alrededor de la cantante. Hasta el año pasado su adeudo fiscal ascendía a siete millones de pesos, según hizo público Hacienda a finales de diciembre. Además, en 2013, Belinda fue acusada por la Fiscalía de evasión fiscal por casi dos millones de pesos, pero el delito finalmente no fue acreditado.

El controvertido anillo es una pieza con un diamante de 12 quilates con corte esmeralda acompañado de gemas de la firma Angel City Jewelers, diseñado especialmente para Belinda. El cantante se lo entregó el 26 de mayo de 2021 en un exclusivo restaurante de Barcelona, tras nueve meses de relación. La boda de la pareja bautizada por los fans como “Nodeli” estaba cada vez más cerca, pero la cancelación fue anunciada el fin de semana pasado. “A todos mis fans y amigos de la prensa quiero compartirles que hemos decidido darle fin a nuestro compromiso y nuestra relación de pareja, llevándonos cada uno lo mejor del otro”, comunicó Nodal en sus redes sociales.

“Con mucho agradecimiento por habernos acompañado en este tiempo. Pido respeto por la decisión que hemos tomado, en donde cada uno vivirá su proceso de separación a su manera y siempre deseándole lo mejor uno al otro por los tiempos felices vividos y los de prueba también. Todo lo que se especula es falso”, afirmó en la publicación que después fue eliminada. Después de tres días de silencio, Belinda compartió el miércoles que ha tenido días difíciles tras la ruptura. “Empiezo una nueva etapa en mi vida, concentrándome en estar bien tanto espiritual como profesionalmente. Cierro este ciclo aprendiendo que el día que una mujer pueda no amar con su debilidad, sino con su fuerza, no escapar de sí misma, sino encontrarse, no humillarse, sino afirmarse, ese día el amor será para ella, como para el hombre, fuente de vida”, expuso en una publicación.

El por qué del rompimiento de la pareja del año, coronada por la revista People en Español en diciembre pasado, sigue siendo un enigma. Sin embargo, las versiones van desde una posible infidelidad hasta que la madre de Nodal le pidió a Belinda alejarse de su hijo. Otra, que ya ha sido desmentida, fue que la actriz le pidió un préstamo a Nodal para pagar las deudas de una casa que su exnovio, el cantante Lupillo Rivera, le había regalado. “Yo a Belinda jamás tuve que darle nada de dinero, nunca le compré nada, bueno, sí le compré regalitos, una bolsa aquí y allá, pero nada extravagante”, dijo Rivera en una entrevista con Telemundo.

La cantante ha acusado este viernes a “personas públicas y de medios de comunicación” de ejercer violencia de género al emitir juicios con estereotipos de cómo deben comportarse las mujeres y ha dicho que posiblemente emprenderá acciones legales. “Esto no es solo por mí, sino por todas y cada una de las mujeres a quienes se les juzga por vivir su vida en libertad. Las mujeres no estamos obligadas a cumplir expectativas estereotipadas de una sociedad que nos sentencia a comportarnos de cierta manera”, se lee en el mensaje.

El romance entre los cantantes también comenzó entre rumores que fueron confirmados en agosto de 2020, cuando ambos eran coachs del programa La Voz México. Ahí se conocieron e iniciaron una intensa relación con expresivas muestras de afecto: Belinda se tatuó las iniciales de Nodal en la muñeca junto a un corazón y el intérprete de Adiós Amor se dibujó los ojos azules de su ahora exnovia en el pecho, su nombre cerca de una oreja y una flecha en la muñeca.

Las especulaciones sobre qué pasará ahora con los tatuajes también forman parte del debate que la noticia de la ruptura ha encendido en las redes. Hasta el Nacional Monte de Piedad ha aprovechado el revuelo de la noticia para ofrecer su servicio. “Por si ocupas Beli… en Nacional Monte de Piedad aceptamos anillos y mucho más”, ha publicado este viernes la casa de empeño en su cuenta de Twitter.

Por su parte, el cantante de música regional mexicana que combina la ranchera con el mariachi anunció este jueves su nuevo disco Forajido en el que incluirá una colaboración con Maná. Su más reciente sencillo Ya no Somos ni Seremos recuerda a su historia con Belinda: “Quise mi piel llenarla de tatuajes para llenar los besos que dejaste, puedo ocultar la historia que vivimos pero no puedo borrarte”, dicen sus primeros versos. “Lo que duró varios meses va a dolerme para toda una vida. Cuando dije: ‘Haz lo que quieras, vete si te quieres ir, no era lo que quería”, continúa.

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