Montserrat Fernández Guarino, dermatóloga: “No hay evidencia científica que relacione el sexo del bebé con los cambios en la piel de la futura madre”
La médica publica ‘Piel de mamá’, un libro en el que ofrece recomendaciones de fácil aplicación, seguras y alejadas de modas para las gestantes que quieren cuidarse
Cuidar la piel siempre es importante, pero en el embarazo aún lo es más. Así lo cree Montserrat Fernández Guarino (Madrid, 46 años), dermatóloga en el hospital madrileño Ramón y Cajal y responsable de Madriderma, clínica privada en Madrid. Fernández Guarino está especializada en salud de la piel en el embarazo, y como tal acaba de publicar Piel de mamá (Círculo Rojo, 2025), un libro en el que ofrece recomendaciones prácticas y seguras para las gestantes que quieren cuidarse sin riesgos y sin caer en la desinformación.
En el volumen proporciona herramientas de fácil aplicación y centradas en la salud, alejadas de modas o recomendaciones no verificadas. La clave, asegura, está en la información fiable y en mantener una rutina sencilla, que proteja sin complicaciones ni excesos. Según explica la médica, en el ámbito científico, su disciplina estudia las dermatosis —cualquier alteración o enfermedad que afecta la piel, el órgano más grande del cuerpo humano— específicas de la gestación, aunque muchas mujeres buscan en ella también respuestas claras sobre el cuidado diario de la piel y el cabello en ese período. “La alteración hormonal provoca cambios en la textura, la vascularización y la sensibilidad al sol, además de favorecer la aparición de estrías y manchas”, detalla. E insiste en que, con las recomendaciones adecuadas, “las mujeres pueden cuidarse sin riesgos y con eficacia”.
PREGUNTA. ¿Qué aporta la dermatología al cuidado del embarazo?
RESPUESTA. La dermatología profundiza en las dermatosis propias del embarazo, que, aunque poco frecuentes, son muy específicas. Pero, sobre todo, ofrece herramientas útiles para cuidar la piel y el cabello en la vida diaria, y para tratar aspectos como cicatrices o cuidados del periné tras el parto. Muchas mujeres consultan sobre qué productos pueden usar, cómo prevenir las estrías o qué hacer ante el acné o las manchas de pigmentación. La dermatología puede dar respuestas seguras a estas dudas en un momento tan delicado.
P. ¿Cómo cambia la piel durante el embarazo?
R. De forma evidente. La piel se ve influida por un cóctel hormonal que altera muchas funciones. Cambia su vascularización, textura, aumenta la retención de líquidos y se vuelve más sensible al sol. Además, la distensión progresiva puede provocar picor y estrías, y las patologías previas como dermatitis o psoriasis pueden mejorar o empeorar. También aparecen condiciones como el melasma —aparición de manchas oscuras en la piel, principalmente en el rostro— o el acné gestacional.
P. ¿Y el cabello?
R. Al principio, muchas mujeres notan que lo tienen más fuerte, brillante y denso, debido al aumento de estrógenos. Pero tras el parto, con la bajada hormonal, se produce una caída de pelo, llamada efluvio telógeno, que puede ser alarmante, aunque en la mayoría de los casos es reversible. En mi libro explico cómo reconocerla, cuándo acudir al especialista y qué cuidados cosméticos pueden ser útiles.
P. ¿Qué cuidados pueden ser útiles para evitar la caída del cabello durante el posparto?
R. Diría que la caída del cabello en el posparto no se puede evitar. Lo que sí se puede hacer ayudarlo para que tenga mejor calidad y una recuperación más rápida. Antes del parto, es importante vigilar los niveles de hierro —ayuda a la oxigenación, la proliferación y el crecimiento del cabello—. Y después del parto, asumir que esa caída va a acontecer, sin angustiarse, y centrarse en cuidar al máximo tanto desde dentro como desde fuera. Desde el punto de vista general, vigilar la dieta y utilizar suplementos nutricionales si son compatibles con la lactancia. A nivel específico, una buena hidratación del cuero cabelludo con champús suaves, no irritantes y preferiblemente hidratantes, y cuidar la fibra capilar con mascarillas específicas e incluso tratamientos en peluquería, siempre adaptados al tipo de cabello. Con todo esto no se evita el efluvio, pero sí se consigue que su impacto sea menor, que el pelo se mantenga con mejor aspecto y que el proceso de recuperación capilar sea más llevadero.
P. ¿Existe relación entre el sexo del bebé y los cambios en la piel de la gestante?
R. Es una de esas preguntas que muchas veces escuchamos. Pero, en realidad, no hay evidencia científica que relacione el sexo del bebé con los cambios en la piel de la futura madre. La secreción sebácea en el embarazo, que puede causar acné, responde a los niveles de andrógenos, que aumentan independientemente de si es un niño o una niña.
P. ¿Y las estrías? ¿Se pueden prevenir?
R. No siempre. Factores genéticos y la calidad previa del tejido conectivo influyen mucho. La cantidad de distensión también. Pero podemos cuidar la piel: una hidratación diaria adecuada ayuda a mantenerla resistente y a reducir el riesgo de rotura. Ingredientes como glicerol, ceramidas, centella o ácido hialurónico son seguros y eficaces. Y, después del parto, tratamientos como láser o radiofrecuencia pueden mejorar su apariencia.
P. ¿Qué recomendaciones hay para preparar el periné ante un parto vaginal?
R. Con ejercicios de suelo pélvico, fisioterapia y masajes con aceites específicos se puede flexibilizar la zona y facilitar la dilatación. Estos cuidados también previenen desgarros y mejoran la experiencia del parto, un aspecto fundamental para vivirlo con respeto y cuidado.
P. ¿Hasta qué punto el cuidado de la piel puede volverse excesivo durante la gestación?
R. Muchas veces hay una confusión: más productos no siempre significa mejor cuidado. Es importante aplicar solo lo necesario, con productos seguros y evitar activos que puedan dañar o irritar. Una rutina sencilla —limpiar la piel, protector solar y crema hidratante— basta. Y tener en cuenta que detrás de muchas campañas hay intereses comerciales que empujan a comprar más y más, con presiones sociales y una idea distorsionada de la belleza.
P. ¿Qué consejos da para cuidar la piel de la cara durante el embarazo?
R. Primero, revisar qué ingredientes se están usando. Los retinoides, ciertos despigmentantes o la hidroquinona deben evitarse. En lo restante, se puede mantener una rutina segura: ácidos suaves por la noche, antioxidantes como la vitamina C por la mañana, siempre con protector solar. Y, por encima de todo, informarse bien, con criterio y sin obsesionarse.