Una jueza federal paraliza temporalmente la aplicación de la orden ejecutiva de Trump contra los militares transgénero
El fallo señala el lenguaje “descaradamente denigrante y estigmatizante” del decreto presidencial
En el penúltimo revés legal a su arrolladora agenda, una jueza federal bloqueó en la noche del martes la orden ejecutiva del presidente Donald Trump que prohíbe a las personas transgénero servir en las fuerzas armadas. La jueza Ana Reyes, con sede en Washington, dictaminó que la orden del mandatario de excluir a las personas transgénero del servicio militar “probablemente viola sus derechos constitucionales”.
Se trata de una medida cautelar solicitada por los abogados en una causa en la que también participan otras 19 personas transgénero enroladas o aspirantes a formar parte del Ejército. Reyes, que fue designada por el presidente Joe Biden, ha retrasado su fallo hasta el viernes por la mañana para dar tiempo a la Administración a apelar. “El tribunal es consciente de que este dictamen dará lugar a un acalorado debate público y a apelaciones. En una democracia sana, ambos son resultados positivos”, escribió Reyes. “Todos deberíamos estar de acuerdo, sin embargo, en que cada persona que ha respondido a la llamada a servir [en el Ejército] merece nuestra gratitud y respeto”.
La jueza añade en el fallo: “Su lenguaje es descaradamente denigrante, su política estigmatiza a las personas transgénero como intrínsecamente no aptas y sus conclusiones no guardan relación con los hechos”. Entre las consecuencias que arrostran los militares trans si la orden se implementa, están el retraso o la denegación de atención médica esencial, despliegues y destinos en suspenso, bajas administrativas forzosas y otros perjuicios, según los abogados de los demandantes.
El teniente segundo en la reserva Nicolas Talbott, uno de los 20 militares transexuales que demandaron a la Administración en este caso —hay otro paralelo en curso, pendiente de resolución—, aguardó en vilo la resolución de la jueza Reyes, al no saber si finalmente sería apartado del servicio la semana próxima, cuando teóricamente debería entrar en vigor el decreto presidencial, del 27 de enero. Su apellido forma ya parte de la jurisprudencia de EE UU, al dar nombre a la causa, Talbott vs Trump, una demanda conjunta de 20 militares, en activo y retirados. “Es un gran alivio”, dijo Talbott. “Esto es lo que siempre he querido hacer. Es el trabajo de mis sueños y por fin lo tengo. Me aterrorizaba estar a punto de perderlo”.
Las dos asociaciones que le representan, GLAD Law y el Centro Nacional para los Derechos de las Lesbianas (NCLR), han celebrado la medida de la jueza. “El fallo decisivo de hoy [por el martes] dice mucho”, ha declarado Jennifer Levi, directora senior de GLAD Law para Derechos de Transexuales y Queer. “Las inequívocas conclusiones fácticas del Tribunal dejan al descubierto cómo esta prohibición se dirige específicamente contra nuestros valientes miembros del servicio [militar] que se han comprometido a defender nuestra nación. Dada la clara evaluación del Tribunal, confiamos en que esta sentencia se mantendrá firme en la apelación” del Gobierno.
“El Tribunal ha actuado hoy con rapidez para proteger a nuestras tropas de los efectos nocivos de esta prohibición irracional. Habría puesto fin a las carreras de miembros transgénero y creado vacíos de personal en funciones críticas. Los efectos nocivos de la prohibición y su precipitada aplicación demuestran que estaba motivada por prejuicios”, declaró Shannon Minter, directora jurídica del NCLR. “Entre los demandantes hay militares de toda la vida que sirvieron en combate en Afganistán, otros que provienen de familias de larga tradición militar y quienes han recibido honores como la Estrella de Bronce. Esta prohibición es injustificable y ataca a los valientes miembros del servicio, reclutas y familias que tanto se sacrifican por nuestro país”.
Tanto Levi como Minter son personas transgénero, con más de tres décadas de experiencia cada una como litigantes en casos emblemáticos de derechos de la comunidad LGTBIQ+. En 2017, bajo la primera Administración Trump, llevaron dos casos similares, Doe versus Trump y Stockman versus Trump, y lograron que se bloqueara la prohibición a las personas trans.
El subjefe de gabinete de Trump, Stephen Miller, se manifestó sobre el fallo en las redes sociales, con este mensaje: “Los jueces de los tribunales de distrito ahora han decidido que están al mando de las Fuerzas Armadas... ¿no hay fin a esta locura?”.
El 27 de enero, Trump firmó una orden ejecutiva según la cual la identidad sexual de los miembros transgénero del servicio “entra en conflicto con el compromiso de un soldado con un estilo de vida honorable, veraz y disciplinado, incluso en su vida personal” y es perjudicial, subraya, para la preparación militar. Este miércoles, la Casa Blanca ha anunciado su intención de pausar la entrega de 175 millones de dólares a la Universidad de Pensilvania por su política favorable a los atletas transgénero, en un contexto de ofensiva generalizada de la Administración republicana contra las universidades de élite, que considera nidos de pensamiento liberal.