Cuba flexibiliza y abarata los trámites para obtener el pasaporte y elimina la obligatoriedad de prorrogarlo cada dos años
La reducción de los costes era una de las reclamaciones recurrentes al Gobierno de La Habana de la comunidad cubanoamericana residente en EE UU
El Gobierno de La Habana anunció el lunes una serie de medidas para “fortalecer los vínculos con sus nacionales en el exterior”, que consisten básicamente en flexibilizar y abaratar los trámites para la obtención del pasaporte cubano, con el que están obligados a viajar a la isla todos sus ciudadanos aunque posean pasaporte y nacionalidad de otro país. Entre las nuevas regulaciones están extender la validez del pasaporte a 10 años, reducir el coste para su renovación en el exterior y eliminar el requisi...
El Gobierno de La Habana anunció el lunes una serie de medidas para “fortalecer los vínculos con sus nacionales en el exterior”, que consisten básicamente en flexibilizar y abaratar los trámites para la obtención del pasaporte cubano, con el que están obligados a viajar a la isla todos sus ciudadanos aunque posean pasaporte y nacionalidad de otro país. Entre las nuevas regulaciones están extender la validez del pasaporte a 10 años, reducir el coste para su renovación en el exterior y eliminar el requisito de prorrogar este documento de viaje cada dos años, un trámite que costaba hasta ahora 90 euros en Europa y 180 dólares en Estados Unidos, donde residen más de un millón y medio de cubanos.
Según el director general de Asuntos Consulares y Cubanos Residentes en el Exterior (DACCRE), Ernesto Soberón, las nuevas medidas, que entrarán en vigor el próximo 1 de julio, responden a la voluntad del Gobierno de “facilitar viajes de cubanos al extranjero, su retorno a Cuba e incrementar su participación en la vida política, económica y social de su país de origen”.
Las autoridades cubanas extenderán la validez de los pasaportes de seis a diez años para los ciudadanos mayores 16 años, y a 5 años para los menores de esa edad. El coste para la obtención o renovación de este documento disminuirá considerablemente para los cubanoamericanos. Los mayores de edad pagarán una tasa de 180 dólares y los menores de 140, independientemente del país en el que sean solicitados, explicó Soberón. Esta medida no afecta prácticamente a los residentes en países europeos, donde los cubanos ya pagaban cerca de 180 euros por sacar el pasaporte. Sin embargo, la reducción es considerable para los cubanos que viven en Estados Unidos, que actualmente deben pagar 350 dólares para obtener el documento de viaje, sin el cual no pueden entrar a su país aunque hayan obtenido la ciudadanía norteamericana.
Desde hace mucho tiempo, abaratar esta tasa era una de las reclamaciones recurrentes de la comunidad cubanoamericana en EE UU al Gobierno de La Habana, que por fin ha adoptado la medida. Cada año, cientos de miles de cubanos residentes en EE UU viajan a su país, y ellos serán los más beneficiados.
También será un ahorro considerable para los cubanos la eliminación del requisito de prorrogar el pasaporte cada dos años, que suponía un gasto adicional y además de una fuente de problemas burocráticos, pues en numerosas ocasiones se daba la circunstancia de que los viajeros cubanos que entraban o salían del país no podían abordar el avión pese a tener el pasaporte vigente por haber olvidado pagar la tasa de prórroga bianual.
Las autoridades migratorias anunciaron, además, que equipararán “el tiempo de estancia en Cuba de los cubanos residentes en el exterior y sus familiares extranjeros (cónyuges e hijos)”, y para los cubanos emigrados antes de 1971 – que hasta ahora podían viajar a Cuba con los pasaportes de sus países de adopción solicitando a las autoridades una visa especial-, se establece ahora la obligatoriedad de ingresar en la isla con un pasaporte cubano. Soberón anunció, además, que se mantiene vigente la prórroga de estancia ininterrumpida en el exterior “más allá de 24 meses, automática y sin costo, anunciada en marzo 2020″ en medio del contexto de la pandemia de coronavirus.
Hasta el año 2013, los cubanos residentes en Cuba para viajar debían obtener un “permiso de salida” concedido por las autoridades. A partir de enero de ese año, se liberalizaron los viajes y se facilitaron los trámites migratorios, ampliándose de 11 meses a dos años el tiempo máximo de permanencia en el exterior sin perder el derecho a la residencia permanente en Cuba.
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