Qué se sabe hasta ahora del colapso del edificio de Miami

Stacie Fang, de 54 años, es la primera víctima mortal identificada y su hijo de 15 años fue encontrado con vida. Al menos han muerto cuatro personas y las autoridades temen que esa cifra pueda elevarse mucho más, debido al estado ruinoso en el que ha quedado la torre de apartamentos, la dificultad de los trabajos de socorro, así como las condiciones metereológicas, con la lluvia complicando mucho el rescate. “Un número de personas”, como informó un por...

Cuánta gente ha muerto

Stacie Fang, de 54 años, es la primera víctima mortal identificada y su hijo de 15 años fue encontrado con vida. Al menos han muerto cuatro personas y las autoridades temen que esa cifra pueda elevarse mucho más, debido al estado ruinoso en el que ha quedado la torre de apartamentos, la dificultad de los trabajos de socorro, así como las condiciones metereológicas, con la lluvia complicando mucho el rescate. “Un número de personas”, como informó un portavoz de la policía sin dar una cifra exacta, fueron conducidos a urgencias al lograr salir de entre los escombros de la torre. Al menos dos de esas personas llegaron a urgencias en estado crítico, y una de ellas murió en el hospital, según información del Hospital y Centro Médico Ventura. El Gobernador de Florida, Ron DeSantis, quiso aportar algo de optimismo y dijo que todavía había esperanzas de encontrar supervivientes. A continuación añadió con tono serio que había que estar preparado para escuchar “malas noticias”.

Cuánta sigue desaparecida y cuánta ha sido encontrada con vida

Este viernes por la mañana seguía habiendo al menos 159 personas desaparecidas, según dijeron las autoridades, que no han dejado de recalcar que los números irán variando cuando se vaya determinando cuánta gente había exactamente en el edificio en el momento del colapso. Un joven de 15 años es una de las 127 encontradas con vida hasta ahora. El senador por Florida, Marco Rubio aseguró que “casi un tercio de los desaparecidos” son extranjeros. “Estamos trabajando con los consulados de varios países en Latinoamérica para ayudarles a obtener visas a los miembros de las familias de las víctimas que necesitan viajar a Estados Unidos”, indicó el republicano en Twitter.

Qué sucedió

Según el relato de aquellos que han sobrevivido a la tragedia, las alarmas de incendios les despertaron hacia la 1.30 de la madrugada (horal local de Miami, 7.30 am en la España peninsular), junto con la sensación de que vivían un terremoto y por eso estaban cayendo escombros. Otros hablaban de haber tenido la impresión de que un misil hubiera caído sobre el inmueble. Quienes lograron abandonar el edificio se encontraron con polvo, escombros y el caos a su alrededor. La alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, afirmó que los equipos de rescate trabajan en una situación de “riesgo extremo”. “Los escombros caen sobre ellos mientras hacen su trabajo. Tenemos ingenieros estructurales en el sitio para asegurarnos de que no se lesionen”, apuntó.

Nacionalidades de las víctimas

Más de 30 ciudadanos de varios países latinoamericanos se encuentran entre los desaparecidos tras el derrumbe de de la torre sur del edificio Champlain, según ha informado el diario Miami Herald. Casi una decena son argentinos; media docena paraguayos, incluida la hermana de la primera dama del país y su familia; tres uruguayos y una familia cubano-americana de tres miembros, así como seis colombianos. Además de en latinoamérica se sigue muy de cerca lo sucedido en Surfside en Israel. En el barrio hay una alta tasa de población judía, con varias sinagogas alrededor de la edificación. El rabino Sholom Lipskar, uno de los organizadores del centro de reunificación familiar, afirmó a última hora del jueves que varios miembros de su templo siguen desaparecidos.

Por qué se ha derrumbado

La pregunta que se siguen haciendo las autoridades y las familias de las víctimas y desaparecidos es la razón por la que el jueves pasado colapsó un edificio que se construyó hace 40 años. El alcalde de Surfside, Charles Burkett, declaró a la prensa que el inmueble había sido recientemente sometido a algunas reparaciones menores, que incluían el tejado. El regidor, sin embargo, quiso puntualizar que “se hacen de forma continua trabajos en los tejados y es difícil de imaginar que esa fuera la causa de semejante catástrofe”. “No hay razón alguna para que el edificio se cayera de esa manera excepto que, literalmente, alguien le quitara los cimientos o fuera barrido por el agua”.

Inspección

El condado de Miami-Dade tiene una regulación por la que los edificios en los que viven varias familias -Champlain constaba de 12 pisos y 135 viviendas- tienen que someterse a un proceso de revisión cada 40 años. El inmueble se levantó en 1981 y había llegado el momento de que un ingeniero o un arquitecto certificara que “tanto la estructura como la instalación eléctrica estaban en buenas condiciones y era seguro para que siguiera siendo habitado”.

Investigación

La investigación sobre las causas puede llevar meses, según las autoridades locales. En las pesquisas participarán ingenieros especializados, así como la Administración de la ciudad de Surfside y el departamento de Bomberos. También científicos del Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST, por sus siglas en inglés), una agencia gubernamental que después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 tiene autorización para estudiar los fallos estructurales de los edificios.

El fracasado y providencial viaje de una ciudadana española

La española Paz Burgueño, de 57 años, tenía previsto viajar el mes próximo desde Madrid a su piso en el edificio derrumbado. La vivienda que compró junto a su pareja en 2019 fue una de las que colapsaron. Su hija comienza la universidad en Florida en septiembre y la iba a acompañar para que se instalara. Desde la madrugada del jueves está “en shock, completamente en shock”, cuenta por teléfono a la corresponsal enviada a Miami, Antonia Laborde. “Pienso que en 15 días iba a estar ahí y estoy viva”. Contactó con los vecinos que conocía y, afortunadamente, salieron ilesos. “La gente está muy conmocionada, no puedes hablar mucho con ellos”, explica. Sobre lo que viene, afirma que ya se verá luego si hay alguna indemnización, pero que el verdadero drama son las familias afectadas. “Las cosas materiales son reemplazables, las vidas, no”.

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