El plan para convertir a Washington DC en un Estado da el primer paso en el Congreso
La nueva legislación avanza otra vez hacia el Senado donde ya perdió con anterioridad y ahora tiene también muy pocas posibilidades de salir adelante por la falta de apoyo republicano
Los impulsores de convertir a Washington DC en un nuevo Estado de la Unión pretenden redibujar el mapa político de Estados Unidos. En la capital de la nación, el Distrito de Columbia, los residentes pagan impuestos, pero no están representados con voto ni en la Cámara de Representantes ni en el Congreso. Este jueves, la Cámara baja aprobó el proyecto de ley que hará posible convertir en Estado a Washington DC por 216 votos a favor frente a 208 en contra.
Pero este proceso ...
Los impulsores de convertir a Washington DC en un nuevo Estado de la Unión pretenden redibujar el mapa político de Estados Unidos. En la capital de la nación, el Distrito de Columbia, los residentes pagan impuestos, pero no están representados con voto ni en la Cámara de Representantes ni en el Congreso. Este jueves, la Cámara baja aprobó el proyecto de ley que hará posible convertir en Estado a Washington DC por 216 votos a favor frente a 208 en contra.
Pero este proceso no era difícil. Como tampoco lo fue la misma iniciativa el año pasado. La última vez murió en el Senado y es muy probable que con esta pase exactamente lo mismo, ya que aunque los demócratas tienen 50 senadores en la Cámara alta (más el voto cualificado de la vicepresidenta Kamala Harris) es prácticamente imposible que puedan sortear el filibusterismo y lograr los 60 sufragios necesarios. Incluso algunos senadores demócratas no están convencidos de que convertir al Distrito de Columbia en el Estado 51º de la nación sea la mejor idea.
Los demócratas se atreven a dar este paso por la creciente presión de los residentes en el Distrito y porque tienen el control de ambas Cámaras del Congreso. Incluso la Casa Blanca de Joe Biden ha dado a conocer su apoyo. En un comunicado hecho público el pasado martes, el presidente de Estados Unidos calificaba el actual estatus de la capital como “una afrenta a los valores democráticos en los cuales se fundó nuestra nación”. La Administración Biden elogió a Washington al considerar que la ciudad posee “una economía robusta, una rica cultura y una población diversa que tiene derecho a una igualitaria y total participación en nuestra democracia”.
La nueva legislación propone la creación de un 51º Estado que garantice un representante en la Cámara y dos senadores. Tan solo la Casa Blanca, el Capitolio de EE UU y el National Mall (donde se encuentra los diversos monumentos a los presidentes) seguirán siendo territorio federal. El nombre de la ciudad cambiará y pasará a llamarse Washington, Douglass Commonwealth —en honor al abolicionista negro Frederick Douglass, quien nació esclavo en Maryland en 1817 y vivió en Washington hasta su muerte en 1895—.
Hasta la fecha, Washington solo ha tenido la representación en la Cámara de Eleanor Holmes Norton, quien no tiene voto a para la que la votación de este jueves es la culminación de toda una vida dedicada a ese propósito. “Mi servicio en el Congreso ha sido dedicado a lograr igualdad para la gente que represento y que eso solo lo puede aportar la estatidad”, declaró Norton. “Mi vida como una washingtoniana de tercera generación ha estado encaminada siempre a lograr esa meta”.
Norton nunca ha dejado de luchar y, el 26 de junio de 2020, en una votación histórica, la Cámara de Representantes aprobaba convertir a Washington DC en el Estado número 51 de la Unión. El resultado final fue de 232 contra 180. Sin embargo la ley murió en el Senado, entonces en manos republicanas.
Muchos son los ejemplos que ponen de manifiesto, para los defensores de la estadidad, la necesidad de la conversión de DC en un Estado: cómo de mal se reaccionó ante la pandemia; que el expresidente Donald Trump ordenase el despliegue de la Guardia Nacional durante las protestas pacíficas del movimiento por los derechos de los negros; la falta de preparación y respuesta rápida ante el asalto del 6 de enero al Capitolio. El Distrito carece de Gobernador, solo tiene alcalde.
Pero quienes se oponen al cambio de estatus argumentan que los Padres Fundadores deseaban que la capital estuviera claramente separada del resto de Estados. Fueron los vecinos Estados de Maryland y Virginia quienes cedieron tierras en la década de 1780 para la creación de una capital federal a lo largo del río Potomac. Washington, el Distrito de Columbia, se convirtió así en la capital permanente de Estados Unidos en 1790. Los republicanos también temen que unir a Washington como un Estado más a la Unión implicaría un aumento de dos senadores demócratas, ya que la población de esa zona vota a ese partido.
La población de Washington es mayor que la de Wyoming o Vermont y está estimada en algo más de 712,000 residentes que pagan impuestos federales, votan en las elecciones presidenciales y sirven en el Ejército, pero no tienen voto en el Congreso.
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